Cinco integrantes del Directorio del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) expresaron mediante una carta abierta su "enorme preocupación por la situación presupuestaria y salarial que está atravesando este organismo". "Con mucha tristeza e impotencia vivenciamos mes a mes un sistemático deterioro en la capacidad institucional de promover la producción, trasmisión y transferencia del conocimiento", enfatizaron.
El texto firmado por Dora Barrancos, Francisco Tamarit, Miguel Laborde, Roberto Rivarola y Tulio Del Bono alerta que el presupuesto 2019 deja al organismo "al borde de la imposibilidad de financiar cualquiera de sus muchos instrumentos de promoción" y que esto, a su vez, "afectará seriamente la capacidad de trabajo de toda la red institucional del Conicet y de las instituciones asociadas, las cuales también se verán seriamente afectados”.
En esa línea, subrayaron: "El presupuesto 2019 aprobado por el Congreso de la Nación contempla para el Conicet un aumento aproximado del 23% con respecto a lo que se habrá ejecutado este año al 31 de diciembre, mientras que la inflación en el mismo período habrá sido superior al 46%. Sin embargo, a diferencia de lo que sucedía en los últimos años, este presupuesto incluye los futuros acuerdos paritarios y prevé una seria disminución, incluso nominal, de los fondos para funcionamiento, inversión y financiación de proyectos. En definitiva, de no mediar una ampliación presupuestaria, es de esperar que continúe mermando la capacidad de investigación científica y tecnológica, la razón del ser del Conicet”.
Los directivos del organismo expresaron que 2018 finaliza con "serias dificultades para el sistema científico-tecnológico nacional", situación que tiene como uno de sus íconos centrales "la incomprensible decisión de suprimir el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación".
Asimismo, marcaron que, en estos tres años de Cambiemos, el Conicet "ha sufrido un profundo y sostenido deterioro de los salarios de sus trabajadoras y trabajadores y de los estipendios de sus becarias y becarios, muchos de los cuales viven con remuneraciones que se sitúan por debajo de la línea de pobreza. A esto se suman la conocida disminución del número de ingresos a las Carreras del Investigador Científico, las serias dificultades para efectivizar en tiempo y forma los ingresos a la Carrera del Personal de Apoyo y la imposibilidad de renovar los cargos del plantel técnico-administrativo que constantemente se pierden, en muchos casos por causa de los bajos salarios
Por otro lado, remarcaron que los fondos para funcionamiento, infraestructura y financiación de la investigación y sus tareas subsidiarias "han disminuido drásticamente año a año". Sobre este punto, develaron que "la mayoría de las Unidades Ejecutoras terminarán el año con un financiamiento de solo el 40% de lo prometido", algo que "no responde a caprichos del Directorio, sino al efecto selectivo que los aumentos de tarifas han tenido en el organismo".