El Partido Obrero (PO) denuncia “persecución política” y que “funcionarios” buscan “intencionalmente” instalar que la fuerza de izquierda está involucrada en el fallido atentado frente al Departamento Central de la Policía Federal de este viernes por la tarde, que abrió un escenario de extrema tensión entre la fuerza de izquierda y el gobierno de Cambiemos.
Efectivos de esa fuerza de seguridad encontraron dos artefactos explosivos en la Casa Central de la Federal y un mensaje atribuido al Partido Obrero. Rápidamente, las autoridades partidarias se despegaron del hecho y lo calificaron como “una miserable provocación política” orquestado por funcionarios del Gobierno Nacional. Desde la administración de Cambiemos salieron a denunciar "violencia política" y catalogaron el hecho como un atentado, como dejó en claro la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
En ese sentido, el PO anticipó que iniciará acciones legales contra funcionarios nacionales y convocó a una marcha a la Plaza de Mayo para el próximo jueves. Según fuentes policiales, junto a los explosivos encontraron carteles con mensajes atribuidos al Partido Obrero que decían: "Liberen a los argentinos presos en el Congreso o seguirían los atentados".
"Nosotros no pusimos ninguna bomba. Ese tipo de expresión sobre los ´argentinos presos´ no es nuestra, es de la propia Policía. Esto es una provocación como todo lo que vienen haciendo", señaló el referente del PO Jorge Altamira en declaraciones a A24. "Es un atentado a nuestro patrimonio y tenemos la filmación de la persona que lo coloca. Posiblemente hubo una falla, se accionó la pólvora pero no llegó a explotar. Esto no tiene que ocurrir en democracia", señaló en conferencia de prensa el jefe de la Policía Federal, Nestor Roncaglia.
“La sola mención del PO, dándole visos de seriedad a un hecho completamente burdo, ya constituye un intento de ensuciar y ensombrecer la lucha que el Partido Obrero está llevando adelante por la libertad de su compañero César Arakaki, detenido por participar de la movilización del 18 de diciembre. Y en general, de desacreditar la acción del Partido Obrero, de la izquierda y del clasismo contra el plan de guerra que el macrismo lleva adelante contra los trabajadores”, indicó la fuerza en un comunicado.
El espacio opositor agregó que “la política de los trolls, de los infundios y de los procesos judiciales que encarcelan militantes políticos incluso antes de ser indagados, ha llegado esta vez demasiado lejos” y alertó sobre “un intento de criminalización, no ya de la lucha social, sino de las organizaciones que organizan a la clase obrera en una orientación de lucha e independencia política”.
Finalmente, el PO anunció que iniciará “acciones legales contra los funcionarios que intencionadamente han difundido esta burda versión”, reclamó “el retiro de todas las acusaciones” y convocó “al pueblo a reforzar la movilización por la libertad de los presos y el fin de la persecución a todos los luchadores contra el ajuste oficial” el próximo jueves a las 17:00 desde Congreso hacia Plaza de Mayo.