Balotaje

Con ventaja ajustada, el candidato oficialista se impuso en Ecuador

Lenín Moreno, el postulante de Rafael Correa, ganó la Presidencia por apenas dos puntos de diferencia sobre Guillermo Lasso, quien no reconoce la derrota. Continuidad del modelo, pero con cambios.

En una elección cabeza a cabeza, ganó la continuidad “con otro estilo”. El oficialista Lenín Moreno se convirtió en el nuevo presidente de Ecuador, al imponerse por una mínima diferencia sobre el opositor Guillermo Lasso, en una victoria que significa un freno al avance de la centroderecha en la región.

 

Moreno, el elegido del actual presidente Rafael Correa por la alianza PAIS, ganó por una ventaja de apenas dos puntos en el balotaje, y ocupará entonces la jefatura del Palacio Carondelet desde el 24 de mayo, por un período de cuatro años.

 

Según los últimos datos del Consejo Nacional Electoral (CNE), con el 98,92% de las mesas escrutadas, Moreno lograba el 51,16% de los votos (5.038.628 sufragios) y Lasso un 48,84 (4.810.083 sufragios).

 

Si bien la tendencia es casi imposible de revertir, Lasso no reconoce la derrota y anunció que presentarán “objeciones” al recuento de votos, a la vez que pidió a sus seguidores que defiendan los sufragios pero “sin caer en provocaciones”.

 

En un breve contacto ante la prensa, en Guayaquil, el candidato de CREO denunció que “se apagó el sistema, y de repente del 20% escrutado se pasó al 90%”, y e insistió en convocar a sus militantes a las calles “pero para hacer protestas pacíficas”. “Señor Rafael Correa, no le tenemos miedo. No juegue con el pueblo”, advirtió.

 

El balotaje se vivió con incertidumbre desde las primeras horas y hubo festejos cruzados en las calles, pues la coalición de centroderecha también se declaraba ganadora, hasta que, con casi la totalidad de las mesas escrutadas, se confirmó el triunfo de Moreno, que en un principio había pedido mesurar las expectativas.

 

“Tenemos una ventaja sustantiva y es definitiva. Les transmito mi más sentido, profundo agradecimiento”, señaló Moreno en una segunda intervención, en las afueras de la sede partidaria, donde celebró que “la revolución continúa, pero con un nuevo estilo, con respeto y sin confrontación”.

 

Moreno, de 64 años, fue vicepresidente de Correa en su primer mandato, pero a lo largo de la campaña se diferenció en cierta forma de su líder político, intentando mostrarse como un hombre “de consenso” y abierto al diálogo. “Hay que defender la revolución. Estamos saliendo de uno de los momentos más difíciles en la economía del país”, aseguró, frente a una multitud en la Tribuna de los Shyris, en el norte de Quito.

 

 

 

Martín Menem, presidente de la Cámara de Diputados. 
Axel Kicillof

También te puede interesar