Con la particularidad de que este año el balance fue elaborado y presentado por la gestión de Julio Garro en base al último período gobernado por Pablo Bruera, el Concejo Deliberante fue rechazado en forma unánime por los ediles, aunque con argumentos distintos.
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En una votación nominal, los ediles del Frente Cambiemos, del Frente Renovador (Oscar Vaudagna, José Arteaga, Luciano Sanguineti y Miguel Forte) y los de los unibloques Alternativa vecinal platense, Gerardo Jazmín; Acuerdo Ciudadano Platense de Marcela Farroni, y Gastón Crespo de Progresistas, desaprobaron la Rendición de Cuentas del último año de gestión del ex intendente, Pablo Bruera. Por su parte, los concejales del Frente para la Victoria –PJ, Fabián Lugli, Lorena Riesgo, Pedro Borgini, Gabriel Bruera, Silvana Soria y Gabriel Céspedes y los del FPV PJ-Nacional y Popular integrado por Florencia Saintout, Guillermo Cara y Gastón Castagneto, votaron negativamente.
“Garro tuvo que presentar un informe por un período conducido durante 345 días por otra gestión, creo que se debería prever una modificación en la ley provincial. Nuestra intención es que la gente sepa toda la verdad, sin usar artilugios contables para presentar números más bellos pero ficticios”, dijo el encargado de presentar el proyecto, el titular de la Comisión de Hacienda, Julio Irurueta.
Los números detallaron que el presupuesto para el período 2015 fue de 2566 millones, contabilizando un excedente de recaudación de 22 millones. De ese monto total, 1500 millones fueron de origen municipal, sólo 372 millones fueron recursos afectados y el resto, todos fondos de libre disponibilidad.
“No hay nada ilegal en cómo han ejecutado el presupuesto, pero lo consideramos incomprensible desde el punto de vista técnico. No había manera de que las compensaciones manifiesten fehacientemente el modo en que se realizaron los gastos. Hemos dejado que el Tribunal de Cuentas realice de oficio la compensación”, agregó el concejal macrista y continuó: “No podemos garantizar que la totalidad de los recursos se hayan utilizado para lo que se debían destinar”.
“El Tribunal de Cuentas ya le advertía al municipio sobre estas erogaciones. Sabían que se estaban excediendo y seguían gastando. No estoy haciendo una denuncia, estoy marcando la cantidad de desprolijidades que nos lleva a dejarlo en manos del Tribunal”, siguió.
Además, desde el PRO indicaron que se encontraron con un faltante de 12 mil bienes, valuados en 13 millones de pesos. Y en cuanto a la deuda total del Municipio, el oficialismo la estipuló en 398 millones, aunque desde el bloque FPV – PJ aseguran que es de 344 millones.
Los concejales brueristas presentaron por su parte un despacho en minoría rechazando la rendición de cuentas por el modo en fue presentada por la actual gestión. En este sentido, Lorena Riesgo, ex titular de la comisión de Hacienda, dijo: “Rechazamos la rendición porque no podemos aprobar algo que no podemos evaluar. Lamento profundamente que el oficialismo omita la posibilidad de compensar las cuentas, es un avasallamiento a las instituciones de la democracia porque no nos dieron la posibilidad de discutir los números reales sobre cómo se gastó el presupuesto municipal. Se tomó la decisión política de que sea un organismo de control el que haga la compensación de fondos”.
“Lo claro y concreto es que la rendición de cuentas es deficitaria, es una ejecución desequilibrada, no tiene nada que ver lo ejecutado con lo presupuestado”, comentó luego el massista José Arteaga y agregó: “Lo más llamativo, nunca visto, son la cantidad de ajustes contables que ascienden a 246 millones. Durante 2015 hubo casi mil asientos manuales, un procedimiento que debe usarse en forma excepcional se convirtió en una metodología sistemática desde agosto”.
Gabriel Bruera, hermano del ex intendente, hizo la siguiente evaluación: "Dejamos un municipio entre los mejores administrados de la Provincia. Hay que recordar que el intendente Bruera no aumentó las tasas en los últimos 3 años. Claramente esto es una operación política para justificar un aumento en las tasas”.