La gobernadora, María Eugenia Vidal, almorzará este miércoles, en su residencia de La Plata, con el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Emilio Monzó.
Será, según confiaron fuentes oficiales, un "encuentro de trabajo", en relación a la función que ambos ejercen.
Sin embargo, la reunión esconde la necesidad de iniciar entre ambos dirigentes, enemistados hace tiempo, un proceso de convivencia pacífica.
Días atrás, fue el propio jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien tomó cartas en el asunto, y los junto en el resto bar "Pizza Cero", en CABA.
La rivalidad que sostienen la gobernadora y el jefe de los diputados, nació por los comienzos de 2014, cuando ambos compartieron el inicio de la campaña hacia la gobernación bonaerense.
En ese momento, hubo desconfianzas mutuas y muchos roces, que llevaron a cortar la relación, al menos la proselitista.
Ahora, ubicados en puestos trascendentes de poder, en plena expansión del macrimos, y con las elecciones internas partidarias muy cerca, resulta inconveniente sostener viejas disputas.
Por eso, el almuerzo, con café de sobremesa, puede resultar el inicio de una nueva relación entre ambos funcionarios.
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