En la segunda reunión paritaria del sector docente en el orden nacional, el ministro Esteban Bullrich mejoró la primera oferta emitida desde la administración macrista y deslizó a los representantes gremiales una suba del salario mínimo de $7800 para el mes de febrero, llegando a $8500 a partir del primero de julio. Ante este escenario, el titular de SUTEBA, Roberto Baradel consideró que se trata de “un buen indicio” para el inicio del ciclo lectivo al ser “un marco positivo” para destrabar las discusiones paritarias en las diversas provincias.
En declaraciones a radio La Red, Baradel comentó que “ahora se acelera la conversación en las provincias”, recalcando en este aspecto la necesidad de que el parámetro fijado por la Nación “facilite la negociación en cada una de las provincias”.
En ese sentido, detalló que la provincia de Buenos Aires postergó hasta mañana la reunión por la paritaria bonaerense y consideró que “seguramente es para estudiar la propuesta y los números” de la oferta a nivel nacional.
Baradel destacó que si bien “la cifra que ofrezca la provincia no tiene por qué ser como la de la Nación, sí tiene que ser sustancialmente mejor”, aseverando que “esto es un marco positivo, sobre todo para las provincias que estaban lejos de los que nosotros planeábamos”, insistió.
”Si los gobiernos provinciales toman la decisión de presentar propuestas acordes con determinados parámetros que discutimos a nivel nacional, entonces estamos ante un buen indicio para que las clases comiencen en fecha”, puntualizó.
Por otro lado, y en declaraciones a Radio Del Plata, el gremialista evaluó que “sería un despropósito que tengamos complicaciones en las provincias" tras esta oferta nacional, al advertir que “lo que complejizaba la negociación en las provincias” era precisamente “el techo a la pauta salarial".