ENVIADO ESPECIAL (Mar del Plata) .- La administración del presidente Mauricio Macri apuesta reducir la actividad legislativa del año que viene, por el calendario electoral del 2017 y también porque el envío de proyectos del oficialismo será sensiblemente menor a los que presentó este año. El dato fue confiado a Letra P por uno de los 35 asistentes a las jornadas de trabajo que arrancaron el jueves en la residencia vacacional que tiene la Presidencia en Chapadmalal, ubicada a unos 20 kilómetros de la ciudad de Mar del Plata.
El escenario legislativo del segundo año de gestión de Macri fue esbozado por el titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, durante el tramo matinal de las jornadas de trabajo, que funcionan con exposiciones de gestión para el año próximo. Los grupos son divididos por áreas de trabajo. Esta mañana uno de los ejes estuvo dedicado a la infraestructura, y hablaron los ministros de Transporte, Guillermo Dietrich, de Interior y Obras Públicas, Rogelio Frigerio y de Hacienda y Finanzas, Alfonso de Prat Gay, que pronosticó que el año próximo será ejecutado todo el presupuesto, sin alterar el déficit fiscal previsto para 2017.
Más allá del intento oficial por mostrar una “proactiva vocación de gestión”, algunos funcionarios destilaron su malestar por el naufragio de la reforma electoral. “No me cabe duda alguna del cajoneo que hizo el senador (Marcelo) Fuentes (del bloque del FpV) fue promovido por algunos kirchneristas sin tierra que organizaron esta maniobra”, le dijo a Letra P el ministro Frigerio cuando llegó a la sala prevista para las conferencias de prensa. La referencia a los desterrados “es por aquellos que no tienen responsabilidad territorial”, amplió Frigerio.
La agenda del “retiro espiritual” empezó esta mañana con una misa en la capilla del complejo vacacional, donde participaron Macri y los ministros Esteban Bullrich (Educación), Carolina Stanley (Desarrollo Social), Jorge Triaca (Trabajo) y la vicepresidenta, Gabriela Michetti, es decir, los escuderos del Ejecutivo que llevan adelante la relación de acercamiento de Cambiemos con el Papa Jorge Mario Bergoglio.
Luego de la primera ronda de trabajo, el área de comunicación de la presidencia organizó una segunda rueda de prensa, donde hablaron la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, Frigerio y Prat Gay, que cargó las tintas contra el proyecto de la oposición para reformar el impuesto a las ganancias. “Ésta es una discusión entre la responsabilidad y la demagogia, y ahí vamos a ver dónde se van acomodando los distintos espacios políticos” dentro del Congreso. Con esas palabras el titular de Hacienda anticipó los intentos del Ejecutivo para llegar a un consenso en las sesiones extraordinarias que convocó el Presidente para debatir Ganancias, entre otros puntos.
Durante la semana pasada Prat Gay afrontó duras críticas de sus pares por la escasa defensa pública que hizo del proyecto oficial de reforma del impuesto. Esta mañana buscó revertir esa pendiente declinante y dijo que la modificación que promueve es la “rebaja más alta de la historia” y con ese argumento acusó a la oposición: “Es gratis la demagogia de decir 'quiero bajar todo' cuando no se es gobierno’”, espetó.
Bullrich no aportó ninguna precisión, pero antes de concluir, deslizó sus quejas por la organización del encuentro. “Esperaba algo más moderno”, dijo en referencia a la noche que compartió en el bungalow con la canciller Susana Malcorra y con la titular de Desarrollo Social, Carolina Stanley. En rigor, las palabras de “Pato”, revelaron que no tenía intención alguna de compartir la noche con sus dos colegas, aunque las habitaciones no son compartidas.
