El PRO está decidido a renovar su poderío en el Club Atlético Boca Juniors y los distintos dirigentes de ese espacio, alineados por Mauricio Macri, trabajan para que al actual presidente de la institución, Daniel “el Tano” Angelici, consiga el apoyo de los socios en diciembre para continuar sugestión.
El candidato a presidente de Cambiemos y el secretario de Gobierno porteño, Marcos Peña, encomendaron a la tropa amarilla brindar toda el apoyo y la logística posible para “llenar de socios” el lanzamiento de Angelici, que será el 15 de octubre en el predio La Rural del barrio de Palermo. La orden alcanza a funcionarios de distinto nivel del Gobierno local, desde secretarios y ministros hasta legisladores porteños y diputados nacionales.
“Sean o no de Boca, todos están ayudando”, explicaron desde el entorno del principal operador judicial de Macri. Naturalmente, los colaboradores de Angelici, incluso los que no son parte de la administración de la ribera, se comprometieron con su jefe político. Es el caso del titular del Ministerio Público Fiscal, Martín Ocampo, confeso hincha de River.
En suma, todos los funcionarios porteños con “amigos” que sean socios de Boca colaboran para que voten al macrismo. En el equipo de Angelici se sorprendieron cuando la diputada porteña Cecilia de la Torre les comunicó que llevaría a un grupo de conocidos al acto de lanzamiento.
Los encargados de coordinar y focalizar en la suma de socios que llevarían ministros y los funcionarios macristas son los legisladores porteños Enzo Luis Pagani, titular de Boca Social y vocal club, y Francisco Quintana. Todo bajo el consentimiento de Macri y Peña, también fanáticos del club de la ribera sur.
El jefe de campaña, el diputado nacional Christian Gribaudo, planea ubicar a seis mil socios que estén en condiciones de votar en los comicios de diciembre. Ya se anotaron agrupaciones y dirigentes xeneizes.
Eso sí, para comprobar si la cantidad de “amigos” socios que lleva cada funcionario es la misma que prometieron, se instalarán molinetes en la puerta del coqueto salón central del predio al que se ingresa por la calle Juncal. Cada socio irá con su carnet, deberá pasarlo por el lector y luego podrá ubicarse en su mesa.
También, trascendió que la instalación de los molinetes y la seguridad que estará presente son para evitar cualquier acercamiento de la barrabrava. Lo cierto es que los dueños de la popular boquense ya se reunieron con todos los aspirantes a la presidencia de la institución y le prometieron lo mismo: plata y socios dispuestos a votar.
El hombre que junta votos en el sector empresarial y dirigencial para Angelici es Horacio Paolini, dueño de la compañía Paolini Grúas. Paolini tiene vínculo desde hace años con el PRO y su empresa fue contratada por el Gobierno que dirige Mauricio Macri.
Como muestra de poder, Paolini, que suena como compañero de fórmula del “Tano”, el miércoles 23 de septiembre llevó en avión privado a buena parte de la dirigencia xeneize al encuentro entre Boca y Defensa Justicia que se disputó en la provincia de Córdoba por la Copa Argentina.
En busca de resultados
Por ahora, el 2015 fue un año para el olvido para Boca Juniors. Mientras su histórico rival, River Plate, y el resto de los grandes, como Racing, San Lorenzo y Huracán alzaron copas, el xeneize no festejó aún ningún título. Además, nadie olvida el conflicto en La Bombonera por el cual debió suspender el partido que Boca y River disputaban por la Copa Libertadores.
Para evitar la malaria, las críticas de la oposición y los socios, Angelici gestionó la vuelta de Carlos Alberto Tévez al fútbol argentino. Sus colaboradores apuestan a que el equipo que dirige Rodolfo Arruabarrena se quede con el torneo local para impulsar su candidatura y pelear por la reelección.
El comunero que juega para la oposición
En las filas de Angelici están embroncados con el intendente de Vicente López, Jorge Macri, hincha riverplatense, porque el último domingo los dirigentes de Boca vieron a un hombre suyo junto a un candidato de la oposición.
Se trata del comunero Walter Federico Klix, que en la interna macrista porteña apostó por Gabriela Michetti, tiene vínculos con el ministro Daniel Chaín, pero el jefe comunal del PRO lo considera un joven de su riñón.
En el angelicismo acusan a Klix de jugar para José Beraldi, a pesar de que el hombre de Flores explicó su apoyo al PRO a nivel nacional sigue intacto y apoya al ex dirigente de Boca Juniors únicamente en el marco de la disputa política del club. La bronca explotó el pasado domingo, cuando durante el partido que Boca disputó con Banfield, Klix compartió palco con Beraldi y los ex jugadores Raúl Cascini y Mauricio “Chicho” Serna, que avalan su candidatura.