El candidato a presidente del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, aseguró este sábado que, si es electo, trabajará con su equipo económico para “llevar la inflación a un dígito gradualmente”. Involuntaria o voluntariamente, el mandatario provincial pone en la agenda un tema sensible para el Gobierno nacional pero también muy preocupante para los sectores medios de la República Argentina.
El gobernador de la provincia de Buenos Aires apeló a uno de los temas más requeridos y preocupantes para el electorado: la pauta inflacionaria. La oposición suele hacer campaña con dardos hacia el oficialismo por el número de la inflación que se registra en el país y por los valores que informa el INDEC, a los que acusan de estar “adulterados”.
En diálogo con Cadena 3, Scioli señaló que para corregir los índices de inflación “no se va a afectar la cuestión central de la producción, el consumo y el poder adquisitivo de los trabajadores”. La promesa del ex vicepresidente de Néstor Kirchner llega en un momento de la campaña en que, según las mediciones del búnker naranja, se encuentra estancado en los 40 puntos y lo sigue Mauricio Macri acariciando los 30 puntos. La chance y el deseo de ganar en primera vuelta están presentes, pero el voto de los sectores medios serán claves. En esa dirección va esta promesa económica.
Como señaló Letra P a principios de septiembre, el equipo de campaña boanerense evaluó que Scioli deberá poner mayores esfuerzos en la provincia de Buenos Aires, la provincia de Córdoba, la Ciudad de Buenos Aires, Santa Fe y Mendoza. A propósito de las declaraciones sobre la inflación, se trata de territorios en donde los sectores medios tienen mucho peso y no suelen inclinarse por el justicialismo ligado al Gobierno nacional. En Córdoba domina Juan Manuel De la Sota y Juan Schiaretti; Santa Fe es gobernada por el socialismo hace años; en Mendoza ganó el radical Alfredo Cornejo y en la Ciudad de Buenos Aires gobierna Mauricio Macri desde 2007. Todos terrenos en donde el kirchnerismo mantiene y mantuvo relaciones tirantes con los oficialismos. La excepción a esta regla es la provincia cuyana que ahora quedará en manos del radicalismo, luego de la gestión de Francisco "Paco" Pérez que, vale decirlo, a pesar de estar alineado con el Gobierno nacional, tiene y tuvo cortocircuitos con la Casa Rosada.
Por otra parte, según consignó la agencia DyN, expresó que entre sus postulados de campaña busca generar “tranquilidad, previsibilidad y certidumbre”.
Naturalmente, no pudo esquivar el tema que recorrer toda la arena mediática: las conflictivas elecciones en la provincia de Tucumán. En ese sentido, el candidato kirchnerista confió en que “las máximas instancias judiciales” van a ratificar “la legitimidad del triunfo de Juan Manzur” en las elecciones tucumanas.
Scioli pidió a los tucumanos “unidad, paz y un poco más de paciencia” tras el escándalo por las irregularidades detectadas en los comicios de esa provincia y los reclamos de la oposición ante la Justicia.
En diálogo con esa radio cordobesa, consideró que una intervención federal a Tucumán sería “un paso atrás” y advirtió que “se va a terminar resolviendo en los máximos tribunales la legitimidad del triunfo de Juan Manzur”.