Veinte días después de las elecciones primarias se conocieron los resultados definitivos que confirman el triunfo del Frente para la Victoria, aunque de repetirse estas cifras en octubre, habría un escenario de ballotage.
El escrutinio final otorgó a Daniel Scioli un 38,69% y al frente Cambiemos el 30,10%, con Mauricio Macri a la cabeza –individualmente obtuvo el 24,48%-, mientras que Sergio Massa alcanzó el 20,56%.
Así las cosas, si se mantiene esta tendencia en los comicios generales, la segunda vuelta sería inevitable para el oficialismo; de todos modos, la diferencia fue de 8 puntos y si la ventaja sobre el acalde porteño llega a ser de diez puntos superando el piso de los 40, el FpV podría vencer en primera vuelta sin necesidad de enfrentar el tan temido ballotage.
De hecho, las encuestas realizadas en la última semana indican que, en caso de un triunfo oficialista el 25 de octubre, sería diez puntos por encima del espacio que lleva al líder del PRO como candidato.
En tanto, los demás candidatos también terminó con mínimas variaciones en los resultados: Margarita Stolbizer (Progresistas) finalizó con el 3,46%; Nicolás del Caño (FIT) con 3,24%; y Adolfo Rodríguez Saá con 2,093%.