Dos días después de que Alberto Weretilneck lanzara “Juntos Somos Río Negro”, y que el Partido Justicialista (PJ) comenzara a reafirmar bases sólidas en El Bolsón, las especulaciones sobre el futuro político de la provincia aumentaron mientras las negociaciones estratégicas avanzan hacia las elecciones municipales del 3 de mayo.
Para eso, el kirchnerismo comenzó a desglosar los matices que provocan dudas en varios de los referentes que, a pesar de las rispideces, conquistan los acuerdos necesarios pero ciertas cuestiones demuestran los tironeos por el poder. Mientras tanto, Weretilneck recordó su buena relación con Carlos “el Gringo” Soria que hizo despotricar a sus hijos.
Luego de acordar el respaldo para los comicios locales, el PJ decidió llamar a internas para dirimir los puestos de la Legislatura provincial en otra muestra de que hasta último momento nada está dicho en el peronismo duro de Río Negro, que espera la oficialización del sufragio provincial para salir a jugar con todo.
“Es algo lógico. Todo el mundo pide algo en estos días”, le contó a Letra P uno de los armadores del espacio, que entiende la demanda de los referentes del Frente para la Victoria–PJ. Es que el planteo, utilizado por el mismo Miguel Ángel Pichetto, demuestra que para organizar su candidatura es necesario ceder espacio en las listas con el resto de los dirigentes.
La demostración de fuerza que ejerció en todo momento Martín Soria, quien tiene todo para una reelección en Roca, marca las demandas de la unidad que se demuestra en cada reunión partidaria. Aníbal Fernández, de paso en la comarca andina, celebró esa posibilidad y adelantó una decisión “interna” que le dé otro tono a la elección del candidato.
Sobre ese tema, como le explicaron desde el bloque justicialista a este portal, algunos diputados analizan una presentación judicial para que las PASO sean una realidad, y no se esfumen como una promesa más del Ejecutivo, aunque esa instancia estaría siendo un estorbo con el nuevo panorama que, a diferencia del resto, se complica en la localidad que maneja Abel Baratti.
Por estas horas se rumorea que en Cipolletti, distrito que el Gobernador entiende y conoce a la perfección, una lista “disidente” podría darle más dolores de cabeza a la estructura que organiza Pichetto, quien no quiere perder terreno en la misión de ganar terreno y darle paso a las nuevas generaciones.
“Cumplimos con el Gringo”
Acompañado por los presidentes de los cuatro partidos políticos que integran “Juntos Somos Río Negro”, Fabián Gatti (REDES), Jorge Cerutti (Unidos por Río Negro), Enrique Muena (Partido de la Victoria) y Elbi Cides (Movimiento Patagónico Popular), Alberto Weretilneck arengó a su entorno con una polémica frase.
“El ‘Gringo’ no quería una provincia que no se tenga que arrodillar en Buenos Aires porque es autosuficiente. Díganme si el ‘Gringo’ no quería que a los humildes, a los trabajadores, que a los pobladores de los pequeños lugares los atendamos igual que a los de las grandes ciudades”. Sus palabras en el círculo italiano, en el virtual lanzamiento de su candidatura junto a Pedro Pesatti, abrieron un nuevo escenario de disputa.
Alejado de la estructura kirchnerista, esa que lo supo recibir, pelea por un proyecto alternativo –acoplado al Frente Renovador– y se anima a pelearles a sus antiguos socios políticos el poder.
“Va a ser un espacio donde no vamos a tener patrones nacionales, donde no vamos a tener violencia y diferencias entre nosotros, sino donde el consenso, el respeto, la tolerancia y la creatividad van a ser la moneda corriente”, dijo el mandatario en una notable contradicción luego de haberse pronunciado a favor de Sergio Massa.
Pesatti, que por estas horas trabaja a contra reloj por el regreso de los tiempos legislativos, también manifestó su alegría por el nuevo partido: “Estamos muy entusiasmados con esto que estamos construyendo porque es un espacio que no tiene jefe; tiene un líder y una conducción que trabaja a través del método de la persuasión que busca convencer mediante la idea”.
Molesta por los dichos de sus rivales, María Emilia Soria, quien parece ser la elegida para acompañar a Pichetto en la fórmula de “unidad”, salió con los tapones de punta y no dudó en salir a pegarle con todo. “El Gringo nunca quiso una provincia paralizada y sin obra pública, con un gobierno donde la única gestión se limitase a anunciar el cronograma de sueldos y donde las expectativas se limiten a comprar un par de camiones para los bomberos, malgastando los fondos petroleros viajando en avión privado o comprando autos de un millón de pesos”, ironizó.