Este miércoles el juez Luis Arias de La Plata, vinculado al ex vicegobernador Gabriel Mariotto, dictó una medida precautelar mediante la cual ordenó al Ejecutivo nacional que “se abstenga de suprimir o afectar derechos adquiridos u otorgar nuevos derechos a la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA)”.
Además, el magistrado resolvió “la prohibición de alterar, modificar, eliminar o suprimir las funciones y la existencia de AFSCA”. A partir de este fallo judicial se tejieron varias interpretaciones, pero hay una inconsistencia clave: el decreto aún no fue publicado en el Boletín Oficial. Entonces, no se puede avanzar con una precautelar sobre una medida del Gobierno nacional que aún no se efectivizó.
El ex titular del AFSCA, removido mediante un decreto de intervención, Martín Sabbatella, se presentó en la puerta del organismo ubicado sobre la calle Suipacha pero efectivos de la Policía Federal no lo dejaron ingresar. Los argumentos de los uniformados variaron según la hora de la tarde: primero, le comunicaron la titular de Nuevo Encuentro que había asueto y no había nadie dentro; luego le informaron que la medida de Arias no le daba potestades para entrar al edificio.
El propio Sabbatella afirmó que esa situación era correcta, pero exigió, amparándose en el fallo del juez platense, que los trabajadores del organismo, que reportan a él, puedan ingresar a cumplir sus funciones.
Ante la negativa de las fuerzas de Seguridad y la insistencia del sabbatellismo, un oficial de la Federal ingresó al AFSCA. En ese momento se sucedió una situación cómica: le tuvieron que explicar cuál era la puerta de ingreso, luego de que el efectivo se empecinó con entrar por otro lugar. Resulta que al lado del organismo nacional está la Secretaría de Legal y Técnica y el oficial se confundió de entrada. Minutos antes, el secretario Legal y Técnico, Pablo Clusellas, abandonó su lugar de trabajo deseando que los medios presentes no lo interroguen.
La situación se descomprimió cuando el policía ingresó al edificio, básicamente porque la cantidad de gente presente en la puerta era poca y no había más efectivos. Minutos después, llegaron dos camionetas de la Federal y se tensó la situación.
El sabbatellismo continuó esgrimiendo el argumento de que el fallo de Arias permitía que ingresen a “trabajar” y el comisario volvió a insistir con que había asueto. Lo cierto es que, durante ese período, nadie entró ni salió del edificio. Mientras tanto, Sabbatella recorría la arteria céntrica peatonal de buen humor y hablando por su teléfono celular.
“El juez no ha resuelto la cuestión de fondo de la legalidad o no del decreto. Por lo tanto voy a esperar que el Poder Judicial lo resuelva. Hay un juez que acaba de decir que son nulas las decisiones de acá adentro”, señaló Sabbatella.
“Si es nulo, son nulos sus actos. Dentro de sus actos está haber decidido que los funcionarios no cumplan su función y no trabajen. Digo, ¿por qué se toma atribuciones que el juez dijo que no tienen? El juez pidió que se abstengan de avanzar con resoluciones. ¿Por qué no podemos acatar las decisiones de la justicia?, las que gustan y las que no”, remarcó el líder de Nuevo Encuentro.
Finalmente, el ex titular del organismo no pudo ingresar al AFSCA. La misma suerte corrieron sus colaboradores, que rechazaban una y otra vez la versión del comisario acerca del asueto administrativo.
El decreto de la polémica
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, anunció en la Casa Rosada la fusión de las autoridades federales de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca) y de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Aftic) en un único ente que regulará las comunicaciones.
Según publicó el diario La Nación, el decreto, aún no publicado, modificará la ley de medios para permitir la transferencia o venta de licencias y sacará de esa norma la regulación de la televisión por cable.
El Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) será presidido por Miguel De Godoy, ex secretario de Medios del Gobierno de la Ciudad durante la administración de Mauricio Macri.
El anuncio del decreto trajo muchas críticas desde la oposición y cuestionamientos de constitucionalistas acerca de la decisión de reformar una ley por medio de un decreto de necesidad y urgencia (DNU).
La respuesta judicial llegó por medio del juez Arias, que dio el argumento a Sabbatella para exigir el ingreso de sus colaboradores al AFSCA bajo la idea de que todo lo determinado por el interventor Agustín Garzón carecía de validez.