“Ese nombre no me cierra. Buscá otro”. La frase pertenece al jefe de Gobierno electo, Horacio Rodríguez Larreta, que le comunicó otra vez al presidente de Boca, Daniel Angelici, que no quiere saber nada con Juan Sebastián “El Enano” De Stéfano, que se autopostula como ministro de Justicia porteño.
Como explicó este portal, el angelicismo apuesta al posible desdoblamiento del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad, que actualmente conduce Guillermo Montenegro, para sacar tajada y quedarse con una parte.
El presidente de Boca Juniors y operador judicial de Mauricio Macri está convencido que el eventual Ministerio de Justicia recaerá bajo su órbita y Larreta no tendrá inconvenientes en agradecer los servicios prestados durante la interna porteña, cuando Angelici se volcó a su favor y hasta aportó fiscales.
De todas formas, el jefe de Gabinete hace meses que adelantó que abriría las puertas solamente a dos hombres del angelicisimo: el ex legislador Martín Ocampo y el subsecretario de Justicia, Javier Bujan. Angelici pidió por De Stefano, pero no hubo caso.
Larreta no ve con buenos ojos la gestión de “el Enano” en el Consejo de la Magistratura (su mandato venció la semana pasada) y enfureció cuando se enteró que, sin ninguna aprobación, ya prometió cargos a colaboradores. Por otra parte, el electo jefe de Gobierno no tolera su vínculo con Jorge Rizzo.
La negación del ex interventor del PAMI a aprobar su candidatura a ministro pone a De Stefano en un incómodo lugar dentro de la banda del binguero, donde la mayoría de los integrantes suena para distintos gabinetes o dependencias dentro del armado PRO.
Angelici pidió el Ministerio de Gobierno de la provincia de Buenos Aires y para ese sillón suena el diputado nacional Christian Gribaudo, que además es jefe de campaña del presidente de Boca en su cruzada por la relección. Ese cargo no sólo deberá pasar por el visto bueno de Vidal, sino del propio Macri, quien ya advirtió que revisará uno por uno de los hombres y mujeres que flanquearán a la flamante gobernadora.
Por otra parte, Martín Ocampo, abogado y amigo personal de Angelici, ya aclaró que quiere seguir al frente del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad y aún le quedan seis años de mandato al frente del órgano que conduce a los fiscales de la Ciudad.
El legislador Enzo Pagani desembarcó en el Consejo de la Magistratura de la Ciudad y, gracias a un acuerdo entre Angelici y Juan Manuel Olmos, tendrá a su cargo la presidencia del órgano judicial. La diputada María Raquel Herrero pasará los próximos años en la Auditoría General de la Ciudad.
Claudio Niño asumirá como legislador porteño y De Stefano presiona, a sabiendas de que Larreta no lo quiere, para recalar en el Instituto Provincial de Lotería y Casinos de la provincia de Buenos Aires. El ex consejero apuesta a eso porque sabe que posiblemente deberá volver a Corporación Buenos Aires Sur, donde ejerció como vocal hasta 2010 y durante la presidencia de Humberto Schiavoni.