Las autoridades de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), expusieron su bronca por el faltazo de Aníbal Fernández a la cumbre que organizó la entidad para escuchar a los postulantes a la gobernación bonaerense para que comuniquen sus propuestas agropecuarias.
Según explicó en una carta que hizo llegar a la sede porteña, “por motivos de agenda” le fue imposible arribar al encuentro que reunirá a Jaime Linares (Progresistas), María Eugenia Vidal (PRO) y Felipe Solá (UNA).
“Si Aníbal habla de diálogo, este no es un buen comienzo”, advirtió Horacio Salaverri quien agregó: “Convocamos a todos los candidatos pero él no hizo lo que tenía que hacer”.
A la espera del candidato del Frente para la Victoria (FpV), la entidad hizo una presentación donde reclamó puntos esenciales en el avance del sector. Caminos rurales y conectividad tuvieron un apartado especial como el demandado plan maestro en el río Salado.
En diálogo con Letra P, el vicepresidente de Carbap, Carlos Seré, recordó el retraso en esa obra que en los papeles debería haberse finalizado en 2012, pero apenas se ejecutó en un 60 por ciento. “No solo falta casi la mitad, hay que readecuarlo”, advirtió Seré.
Demandas sobre la “presión” impositiva, seguridad y obra hídrica (una de las más reclamadas) se repitieron en la presentación que tuvo como excluyente noticia la ausencia de uno de los candidatos más resistidos.
“Por cuestiones de agenda no puedo participar. Manifiesto mi dicisión de conversión del sector agropecuario, agroindustrial, forestal y pesquero en uno de los principales ejes de la provincia”. Ese fue uno de los párrafos que envió Aníbal, quien según pudo averiguar este portal pidió garantías ante las posibilidades de algún "escrache".