La situación política de Sergio Urribarri lo obliga a caminar los distritos más populares del Gran Buenos Aires para no quedarse atrás entre los referentes del oficialismo duro, aunque las encuestas marquen otra cosa. Hoy, junto al intendente Mariano West, un histórico del PJ, recorrerá Moreno.
Luego de que se hiciera público un escándalo que salpica su gestión, el Gobernador entrerriano se entrometerá en un distrito complejo y marcado por una interna dura que tiene la pelea por el ejecutivo municipal como justificativo.
Como informara Letra P, West soporta el embate del concejal Walter Festa, referente en esa región del Conurbano de la agrupación Peronismo Kirchnerista (PK), sección fuerte de La Cámpora, espacio delineado por el todo terreno José Ottavis.
El termómetro electoral se marca con una campaña de afiches, y cruces de declaraciones, que movilizaron la interna en el Frente Para la Victoria (FPV), aunque una buena jugada del Jefe comunal dejó sin bloque propio a Festa, quien pensaba en “Futuro Moreno” para demostrar que su candidatura es un hecho.
Lejos de esa pela, el secretario privado de Urribarri, Sergio Cornejo –expuesto por el escándalo narco– describió la actividad del Pato en el Oeste de la Primera sección electoral, que tendrá una reunión con la militancia de la localidad, recorrida por la Universidad y saludos con funcionarios de la gestión.
En los últimos días, para no ser menos en su tierra, se mostró junto al titular del Sedronar, Juan Carlos Molina, en Paraná y Colón, para no perder terreno en los distritos más importantes de Entre Ríos, por la instalación del massismo y el Frente Amplio Unen, con fuerte arraigo en los municipios radicales.
El expresidente mantiene la incertidumbre sobre su futuro político y una eventual candidatura. El mensaje a JxC: "Aprendan a competir".
El exministro de Economía defendió el acuerdo que negoció con el Fondo. Como un dejo de ironía, celebró el apoyo político a Massa de todo el arco del FdT.