Según se informó desde la Dirección Nacional de Vialidad (DNV), “se encuentra totalmente interrumpida la circulación vehicular en ambos sentidos”. El organismo detalló además que en la zona se realiza un desvío a la altura del kilómetro 213 de la autopista Buenos Aires-Rosario hacia la vieja ruta 9.
En este sentido en la zona se montó un operativo de seguridad vial en el que trabajan personal de la concesionaria y Gendarmería Nacional. Asimismo, en el tramo de la ruta nacional 188 comprendido entre los kilómetros 7 y 69 la circulación se encontraba interrumpida en ambos sentidos debido a que las intensas lluvias provocaron anegamientos en la calzada.
Próximo a Ramallo, en la ciudad bonaerense de San Pedro, cerca de 300 personas permanecen evacuadas por las inundaciones que provocó la intensa lluvia que durante la madrugada castigó sobre la zona y complicó aún más la situación, según aseguró el oficial auxiliar de bomberos locales Edgardo Epelde.
“No ha parado de llover en toda la noche y hace dos horas está lloviendo torrencialmente, lo que complica más la situación”, manifestó sobre el temporal, que ya en la jornada del domingo había provocado evacuaciones y derrumbes de al menos cuatro casas en la costanera del río.
Por su parte el intendente Pablo Guacone manifestó que “la situación es muy complicada” dado que en 48 horas llovieron alrededor de 330 milímetros “hay más de 20 viviendas en riesgo, evacuados y barrios anegados”.
En declaraciones a Nacional Rock, el Jefe comunal dijo que hay viviendas ubicadas en la cresta de las barrancas, que por la erosión que provoca el agua, hace peligrar las estructuras por el debilitamiento de las paredes y las posibilidades de desprendimiento. En este sentido agregó que el comité de crisis trabaja en la sede de bomberos y agradeció la ayuda de Defensa Civil, de la Cruz Roja, del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia y de la Nación y del Ministerio de Gobierno bonaerense.
“No hay alcantarilla que te alcance” se lamentó el mandatario local y agregó: “Es como que te atan las manos. Miras hacia el cielo y pedís que se termine de una vez por todas”.
Además, señaló que el panorama no es alentador “porque se estima que recién para la tardecita va a disminuir la lluvia”.