Macri decidió separar las elecciones de la Ciudad de las nacionales. Según anunció el Gobierno porteño, las primarias abiertas simultáneas y obligatorias (PASO) serán el 26 de abril y la primera vuelta, el 5 de julio. De haber segunda vuelta, tendrá lugar el 19 de julio. El desdoblamiento será un dolor de cabeza para los votantes, que podrían llegar a concurrir a las urnas hasta seis veces en el año, en caso de que se llegue al ballotage en las dos jurisdicciones.
Así, Mauricio Macri confirma que su estrategia será intentar alzarse con un casi seguro triunfo en la Ciudad antes de las presidenciales, y que eso sea el gran espaldarazo para las elecciones nacionales, que serán el 9 de agosto (PASO) y el 25 de octubre (generales). Esa es la estrategia que impulsaban los sectores Emilio Monzó y Gabriela Michetti, que convencieron al líder del Pro de que, si el partido gana la Ciudad primero, Macri quedará mejor parado para la carrera por la Rosada.
Desde hace tiempo, en el entorno de Macri se barajaban los pros y contras de las dos opciones. Mientras algunos sugerían desdoblar, el empresario e influyente amigo de Macri, Nicolás “Nicky” Caputo, había recomendado unir los comicios para evitar el fastidio ciudadano y, además, asegurar la Ciudad arrastrando votos con la boleta que llevaría al jefe de Gobierno como candidato a Presidente. Otra razón más que poderosa que pesaba en la opción de los comicios unificados es el enorme gasto que supondrá la organización de tantas jornadas electorales.
A favor de esa alternativa había operado, en un principio, Horario Rodríguez Larreta, que quiere quedarse con el distrito porteño. Según explicaban a mitad de año en el macrismo, al jefe de Gabinete le convenía atar su suerte a la de Macri, ya que el jefe de Gobierno le arrastraría a su boleta los votos que no le garantizan las encuestas. Sin embargo, en los últimos días Rodríguez Larreta dejó trascender entre sus colaboradores que prefería desdoblar los comicios, con la seguridad de que se quedará con la Jefatura de Gobierno, aún si le toca competir en las internas contra Michetti.
Pero Macri terminó inclinándose por el desdoblamiento y comenzó a dar muestras de su jugada a principios de noviembre, cuando reglamentó el uso de la boleta electrónica para las elecciones. La existencia de los dos sistemas – el electrónico y el tradicional, en el cuarto oscuro – también complicaba la unificación de las elecciones.