Desde OTRANS se acusó a la Policía de haber “entrado a los domicilios privados de las chicas y haberles robado dinero”, y dijeron que “a la madre de una de ellas, de 73 años, la desnudaron y revisaron bajo el supuesto de que tenía drogas”.
Además, las integrantes de la entidad aseguraron que se sienten “amenazadas” porque es común que patrulleros con integrantes de la fuerza las desnudan en plena calle para sacarles fotos y acusarlas de hacer cosas obscenas en la vía pública.
“Las chicas están en la calle por un plato de comida o para garantizar el sustento de sus familias”, explicó Andrea, quien denunció que hay un “surgimiento de un plan sistemático de represión, persecución, y criminalización de las compañeras travestis y trans de la ciudad”.
En ese sentido, desde la comunidad de Lesbianas, Gays y Transexuales (LGTTTBIQ) denunciaron en un comunicado que “desde el día 15 de este mes se han incrementado los ataques, amparando en procedimientos de investigación por drogas, acusadas de exhibicionismo y por denuncias particulares”.