La facultad fue tomada el jueves pasado, con distintas movilizaciones y la marcha al Hospital San Martín, donde se impidió un exámenes de la “Prueba Final Obligatoria” (PFO), en el marco del cuestionado esquema que exige tener todas las materias aprobadas antes de iniciar la práctica equivalente al sexto y último año de la carrera.
La toma del edificio contó con una jornada cultural de recitales y debates. Además, se aprobó la moción de pintar un mural en el frente de la Facultad y hasta el jueves se dejó sin efecto la medida, día en que habrá una instancia de PFO en el Hospital San Roque de Gonnet.
Según el diario El Día, Jorge Martínez, decano de Medicina, advirtió que “mientras esté quebrado el orden institucional se suspenderán todas las actividades” y destacó que “no se pudieron tomar exámenes de PFO, pero tampoco finales regulares ni recuperatorios del ingreso”.
Asimismo, lamentó que se pintaran frentes “poniendo el riesgo todo el trabajo de recuperación edilicia que se llevó adelante con mucho esfuerzo”.
Desde la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU) se avaló el papel del decanato en el conflicto.
Néstor Pan, presidente de la CONEAU, manifestó que “si la situación de conflicto se prolongara, habría que considerar una alta probabilidad de retiro de la acreditación a Medicina de La Plata; entendemos los tiempos y circunstancias políticas, pero en ninguna otra facultad del país se dio un planteo de este tipo. No dejamos de acompañar al decanato, porque lo que construye en diez años se puede derrumbar en uno”.