Con el objetivo de coordinar acciones para solucionar una situación que le genera fuertes dolores de cabeza, el intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra, se encargó de gestionar recursos materiales y económicos con diferentes ministerios de Nación y Provincia. Es que la situación dejó a muchos barrios de la localidad de la tercera, que sufrió el temporal del inicio de esta semana.
Según le dijeron desde el Municipio de la tercera a Letra P, el monitoreo en los lugares afectados, que son unos 30, llevó suministros a los habitantes que padecen la situación, aun sin resolver por las empresas prestadores de energía eléctrica y agua potable. “Sepan que estamos al tanto de los hechos de violencia y vandalismo en la región y trabajamos para combatirlos y prevenirlos”, reconoció Pereyra, a través de su cuenta oficial de twitter. Es que la situación empeora.
Ayer fueron detenidos los protagonistas de un intento de saqueo en una de las zonas más populares de la región. “Pedimos por favor a todos, mantengamos la cordura y la tranquilidad. Estamos trabajando arduamente para resolver estos problemas”, sostuvo el titular de la Federación Argentina de Municipios (FAM).
Según comunicó EDESUR, una de las empresas cuestionadas, se reestableció parcialmente la luz en los barrios Chacabuco, Villa Angélica, Villa Mónica Nueva, Santa Marta y Villa Esther, “donde las cuadrillas continúan realizando labores”. Además, desde la comuna destacaron que muchos transformadores y cables “se han visto afectados por la gran cantidad de hechos vandálicos cometidos por forajidos, que lejos están de querer la resolución del problema”.
Desde ABSA, la empresa que depende de la gestión que encabeza Daniel Scioli, anunciaron que sólo “73 de los 104 pozos existentes se encuentran funcionando”. Ante ésta situación, el jefe comunal advirtió: “reiteramos la exigencia a ABSA y a EDESUR para que restablezcan rápidamente el servicio”.
Ayuda por el “efecto” Córdoba
Luego de la “psicosis” que describía Alejandro Granados, el ministro de Seguridad provincial, Julio Pereyra no dudó un minuto en medio de la compleja situación y se comunicó con altas esferas para que lo ayuden en un panorama que comenzaba a ser complicado.
Para contener alguna revuelta, arribaron al distrito 26 efectivos de Infantería que se sumaron a los móviles y al personal de la Policía de la Provincia de Buenos Aires. Con la misma tarea, gracias a una gestión de peso, arribaron efectivos de Gendarmería con un “escuadrón antitumulto” con 150 efectivos, además de los 26 vehículos de patrullajes.
“Muchas gracias al compañero Jorge Capitanich por su llamado y por su solidaridad con nuestro distrito”, volvió a escribir Pereyra, quien espera con ansias las respuestas de las empresas.