La Plaza San Martín de la capital bonaerense fue testigo de una jornada particular en el mundo político y funcionó durante toda la tarde como el centro neurálgico de distintas manifestaciones.
Si bien lo esperado era, por un lado, la llegada de los ruralistas a las inmediaciones del palacio legislativo para rechazar la sesión y, por el otro, el apoyo manifiesto a la iniciativa del ejecutivo de parte de Intendentes y diferentes agrupaciones como la CTA o el Movimiento Evita, la foto se completó con la llegada de la CTD Aníbal Verón y el Movimiento Quebracho hasta las inmediaciones de la concurrida zona.
Estos últimos, atentos al montaje mediático que significaba la reforma fiscal, se movilizaron en reclamo al recorte de la cuota para comedores escolares por parte del Ministerio de Desarrollo Social según indicaron. Se acercaron por calle 7, desde Plaza Italia intentando cruzar por donde estaban los integrantes de los grupos que auspiciaban por la reforma fiscal.
Pero en la esquina de 7 y 50, un cordón policial frenó la marcha del movimiento piquetero y allí se quedaron hasta que un grupo de manifestantes pudieron mantener una reunión con autoridades provinciales.
De esta manera, en una soleada tarde platense, había gomas quemadas con caras tapadas y palos por un lado, bombos con cantos kirchneristas y cajas de vino por el otro y, más replegados sobre el centro de la plaza, la cúpula jerárquica del sector rural del país que arengaba desde un micrófono a los chacareros que se acercaron hasta la ciudad porque sus intereses-según ellos- se ven perjudicados.
“Sentíamos que estábamos siendo manoseados y nos venimos para acá” explicó en diálogo con Letra P el Presidente de la Sociedad Rural, Hugo Biolcati luego de la negativa de Daniel Scioli a atenderlos y agregó en relación a los pasos a seguir que “nos vamos a reunir, a conectarnos con el resto del país y vamos a analizar qué hacemos”.
En un escenario improvisado, se ubicaron el mismo Biolcatti y a su lado el titular de la Federación Agraria Argentina Eduardo Buzzi, que con micrófono en mano fue más allá y auguró “Si no nos atienden las medidas de fuerza no van a hacer a nivel provincial, van a hacer a nivel nacional” y los recuerdos de la 125 que aparecieron por si solos.
A menos de 100 metros, Mario Secco, intendente de Ensenada, explicaba a Letra P: “Es muy mezquina la posición del campo, hoy un ensenadense paga más impuestos que algún chacarero que tienen grandes dimensiones. Acá la ruta hay que bancarla entre todos, la seguridad, las escuelas hay que bancarlas entre todos”.
En este mismo sentido se manifestaba el intendente de Bragado, Aldo San Pedro,. al indicar que “nosotros –por el municipiode Bragado- tenemos 220 mil hectáreas en el partido; de esas, 150 mil se siembran de las cuales 100 mil son explotadas con plantación de soja. Ayer a la noche nos han cortado la ruta. Creen que cuando les va mal a la gente del campo les va mal a toda la argentina pero cuando les va bien, son ellos los beneficiados”.
Una vez finalizado el parte rural, algunos legisladores de la oposición se acercaron hasta la plaza San Martín a escuchar e informar a los ruralistas. Allí se lo vio al Presidente del Bloque de Senadores de Unión Pro Alfredo “Tati” Meckievi junto a su compañero Aníbal Aseff; este último le contó a Letra P desde su perspectiva que “por suerte la movilización de la gente del campo y la palabra nuestra en el Senado la semana pasada en una sesión que se extendió muchísimo imposibilitó la sesión”
Así, la tarde corría entre Diputados que se acercaban a hablar con ruralistas mientras que dentro del recinto se negociaba y se contaba que faltaba uno, dos o tres legisladores para dar quórum. Los bombos que no dejaban de sonar y el humo de las gomas que teñía el aire, aromatizaba al mismo tiempo al gran cordón de infantería que los contenía.
Ya cuando la tarde se agotó, se confirmó que la sesión se pasó para este jueves y los ruralistas se contentaron, mientras que los oficialistas seguirán ahora pensando en cómo lograr ese ansiado dos tercios.