En el día jueves, el vicegobernador provincial Gabriel Mariotto estuvo acompañado por el periodista Horacio Verbitsky, y ambos se presentaron en la Unidad Penitenciaria número 47 con el objetivo de entrevistarse con los reclusos.
Hasta ahí todo era normal, salvo por un detalle que obviamente no es menor: esta recorrida se hizo sin previo aviso; no estaban enterados ni el ministro de Justicia y Seguridad bonaerense Ricardo Casal, ni mucho menos la Jefa del Servicio Penitenciario, Florencia Piermarini.
Este fue el motivo que encendió la luz de alerta en el ministerio de Seguridad. Quienes estuvieron presentes en esos momentos aseguran que el clima de tensión e incertidumbre que se vivió a raíz de esa visita fue muy marcado, y con el correr de los minutos muchos se preguntaban –sorprendidos- entre sí “¿en qué terminará todo esto?”.
Estas extremas tensiones en el bloque oficialista siguen dando que hablar, y el ex motonauta por momentos se siente realmente acorralado, y cuando mira alrededor, no cuenta con el apoyo que desea.
Scioli y Randazzo apuntados por el kirchnerismo
En este contexto, Daniel Scioli también está atravesando momentos internos muy confusos, en donde prácticamente ya se le achica cada vez más el margen, y son inocultables los caminos paralelos que transitan –a pasos cada vez más firmes- sus hombres más cercanos.
Cabe destacar lo acontecido en la última sesión de la Cámara baja bonaerense de hace tan sólo un par de días, en donde los legisladores de su mismo partido oficializaron los pedidos de informes para investigar a la empresa de juegos Boldt y para pedirle al gobernador las explicaciones del caso Luciano Arruga.
En medio de la embestida desplegada por Amado Boudou y el camporista José Ottavis, el panorama se enrareció al conocerse este viernes que Scioli y Randazzo tuvieron un encuentro reservado, donde, según LPO, “analizaron posibles cursos de acción ante lo que entienden es un ataque directo contra ellos”.
Esta información, que llegó a los despachos más importantes de la Casa Rosada, fue la que detonó ayer las insistentes versiones de renuncia de Randazzo.