“La Constitución tiene muchas cosas para reformar. Pero modificar la cláusula de reelección es malo para el caso Menem y para cualquier otro!”. Tajante fue el tweet del senador provincial Alberto De Fazio, manifestando claramente su postura con respecto a una posible “re-re” de Cristina Fernández.
Es que el senador sciolista no pudo contener sus ganas de hacer público su pensamiento y se expresó sin tapujos en la red social de los 140 caracteres. De esta manera hizo parar la oreja a varios dentro del seno kirchnerista, pero que a decir verdad, muchos de ellos no se sorprendieron tanto.
Basta con repasar la carrera política del legislador para comprender que sus últimas declaraciones en contra de la “re-re” de Cristina son coherentes con su línea, que, precisamente, no es la K.
De Fazio fue candidato en el año 2005 acompañando a la boleta de Chiche Duhalde. Hombre de Camaño –candidato a diputado nacional por Roberto Lavagna en 2007- en Quilmes, lo posiciona como un hombre no alineado a la Rosada. No hace mucho, en el cierre de listas, el intendente quilmeño Francisco “Barba” Gutiérrez había puesto el grito en el cielo al no ver con buenos ojos la posibilidad del ingreso de De Fazio.
Indudablemente, el senador sciolista no pudo ocultar su pasado duhaldista e instaló este intercambio de posturas, que claramente lo alejan del bando kirchnerista, en referencia a la posible re-reelección de Cristina Fernández.
Todo aquello quedó claro anoche, cuando el senador a última hora se refirió a la Constitución Nacional nuevamente, pero esta vez para proponer sí una reforma: el sistema de coparticipación federal.
En ese sentido, el senador quiso demostrar que tiene autonomía y dijo que lo verdaderamente importante sería discutir el sistema de coparticipación federal, ya que “Buenos Aires necesita recuperar sus recursos”. Además remarcó la importancia que esto implica para el gobierno, atendiendo una cuestión relevante, como es la recaudación.
Con todas estas declaraciones se abrió un nuevo capítulo de disputas entre kirchneristas y sciolistas, que parecen estar posicionados en veredas opuestas a medida que van surgiendo nuevos temas y discusiones.