La movilización del sindicalismo opositor, fue confirmada después de una extensa reunión entre el propio Moyano y Micheli en la sede de la CGT de la calle Azopardo, donde ambos dirigentes participaron de la presentación del libro “El salario no es ganancia”, del ex titular de la juventud sindical de la CTA Juan Pablo Ruiz, dedicado a uno de los principales reclamos de estas centrales contra el Ejecutivo: la suba del mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias.
La nueva marcha, propone trascender el ámbito sindical y sumar a parte de los sectores que se expresaron en la protesta del 8 de noviembre en el Obelisco.
Moyano destacó que la nueva marcha es otro paso del “plan de lucha” iniciado con la CTA opositora, el barrionuevismo y otras entidades como la Federación Agraria (FAA), de Eduardo Buzzi, el cual “no se agotó el 20 de noviembre”.
El líder camionero señaló que “en la medida que el Gobierno vaya cometiendo errores vamos a ir profundizando la lucha” y lamentó que el Ejecutivo “no le da bola a nadie”.
Además, anticipó que buscarán la presencia de jubilados en la marcha a Plaza de Mayo, quienes “fueron insultados por la Presidenta” según Moyano con los dichos de Cristina Fernández de Kirchener sobre “los buitres y los caranchos no sólo están afuera, también lo están adentro”.