El sector extractivista espera la luz verde en otras seis iniciativas, sobre los diez que quedan por analizar. Hasta ahora, más YPF que desembolsos extranjeros.
Los gobernadores de la Mesa del Cobre buscan inversiones con el RIGI
En los diez meses de vigencia del Régimen de Incentivos para las Grandes Inversiones (RIGI), el ministro Toto Caputo aprobó apenas cuatro proyectos. Tres son energéticos y cuentan con la participación de YPF: un oleoducto, un buque de licuefacción para exportar GNL y un parque solar. El cuarto es un yacimiento minero para la producción de carbonato de litio.
El RIGI fue reglamentado en agosto de 2024 para inversiones de un mínimo de u$s 200 millones. El conjunto de proyectos que ya tienen los beneficios impositivos y aduaneros por 30 años comprometió una inversión de u$s 12.299 millones. Esperan, además, la aprobación de otros diez proyectos para totalizar una inversión por u$s 16.514 millones.
El sector minero ya manifestó su impaciencia por la demora en las definiciones. La reglamentación establece que en 45 días hábiles, el Ministerio de Economía debe aprobar o rechazar las iniciativas. Este plazo puede extenderse si se solicita información complementaria o aclaraciones.
De los proyectos presentados sin aprobar existen cuatro de minería de litio: en Catamarca (Sal de Vida y Hombre Muerto Oeste) y Salta (Mariana y Sal de Oro).
Dos en San Juan, uno de minería de oro (Gualcamayo) y otro de cobre (los Azules); y dos de energía eléctrica en Buenos Aires (La Rinconada y Parque Eólico Olavarría).
También están en evaluación la Terminal Multipropósito de Timbúes en Santa Fe y la planta siderúrgica de Sidersa en San Nicolás, Buenos Aires.
El primer proyecto que aplicó al RIGI fue el parque solar fotovoltaico de 305 MW "El Quemado", de YPF Luz y desarrollado por la empresa de energía mendocina EMESA, en la localidad de Jocolí, Las Heras, Mendoza, que se convertirá en el proyecto más grande de Argentina. Es una inversión de u$s 211 millones. Buscan generar una capacidad instalada de 305 megavatios.
El otro proyecto es el oleoducto Vaca Muerta Sur, la mayor obra de infraestructura de evacuación y exportación de petróleo para el país, con una inversión de u$s 3.000 millones. "Un antes y un después que permitirá responder a la demanda asiática de crudo", definen en el sector.
Es un caño subterráneo de casi 500 km desde Neuquén hasta el golfo San Matías, en Río Negro, para aumentar el transporte de petróleo.
YPF, junto a las petroleras de Miguel Galuccio (Vista), Marcelo Mindlin (Pampa Energía) y del grupo Bulgheroni (Pan American Energy-PAE); más Pluspetrol, Chevron y Shell; conformaron el consorcio Vaca Muerta Oil Sur (VMOS).
Argentina podría alcanzar para 2030 un superávit energético de u$s 30.000 millones con los hidrocarburos que suma Vaca Muerta.
El tercero aprobado es el de Pan American Energy (PAE), de la familia Bulgheroni, que lidera una alianza de empresas hidrocarburíferas para instalar dos buques de licuefacción en el Golfo San Matías y producir gas natural licuado y exportar al mundo.
PAE, con un 30%, encabeza el consorcio de empresas Southern Energy, integrado por YPF (25%), la nacional Pampa Energía (20%), la inglesa Harbour Energy (15%) y la noruega Golar LNG (10%).
Golar LNG es la dueña del buque de licuefacción Hilli Episeyo, que llegará al país en 2027 y que permitirá exportar 11,5 millones de metros cúbicos de GNL al día. La otra embarcación es MKII, que puede producir 3,5 millones de toneladas de GNL por año.
La inversión es de aproximadamente u$s 2.900 millones en los próximos diez años para llegar a u$s 6.878 millones, que es la cifra oficial que presentó el Ministerio de Economía en el informe gubernamental ante el Congreso.
Las empresas anunciaron también la creación de 600 puestos de trabajo directos e indirectos en la instalación del barco y 850 para operar el nuevo sistema.
La minera global Río Tinto tiene el proyecto Rincón Litio, que anunciaron con una inversión de u$s 2.700 millones para producir 60 mil toneladas anuales de carbonato de litio de grado batería.
Es la extracción de salmuera mediante un campo de pozos de producción, instalaciones de procesamiento y de residuos, así como la infraestructura asociada. Van a utilizar tecnología de extracción directa de litio (EDL), para favorecer la conservación del agua de la puna salteña.
El primer año del gobierno libertario la Inversión Extranjera Directa (IED) fue de u$s 900 millones y en 2025 siguen por el piso.
La compra de empresas extranjeras por parte de capitales argentinos como Procter & Gamble, Petronas, Exxon Mobil, HSBC, Xerox, Telefónica, Clorox, Prudential, Nutrien o Mercedes Benz significó un egreso de inversiones; y, según la cifra del Banco Central, el resultado indica que se fueron más de u$s 1.700 millones entre diciembre 2024 y abril de 2025.
A pesar de la baja de inflación y la salida parcial del cepo cambiario, la eliminación del déficit fiscal, Argentina sigue con restricciones para recibir el flujo de capitales externos. Quedó excluida como destino de grandes fondos de inversión, que sólo pueden invertir en mercados con calificación más elevada.
Morgan Stanley Capital (MSCI) acaba de mantener a Argentina calificada como mercado “stand alone” o “independiente”, al que había descendido en 2021.
Es una categoría por debajo de “mercado de frontera” y dos escalones respecto de "emergente" y “desarrollado”.
Las consecuencias son el acceso a crédito más caro y en cuentagotas, eso golpea la economía real: menos inversiones productivas y falta de financiamiento para empresas.