El peronismo de la Quinta sección electoral se impone una misión: retener las dos bancas que tiene en el Senado de Buenos Aires y evitar ser arrasado por la alianza PRO - La Libertad Avanza, que en esa región es más fuerte que en otros lugares. Los ojos también están puestos en el rol de la UCR, que aún no confirma si será parte de un frente anti-K pintándose de violeta o hará la suya.
La Quinta sección electoral tiene 1.310.478 personas en condiciones de votar, de las cuales 589.157 residen en General Pueyrredón, cuya cabecera es Mar del Plata. Es el 43,95% del total del padrón seccional. Por eso, lo que se resuelva en ese distrito será clave para el resto de la región de la costa bonaerense.
La tribu peronista cree que será una elección parecida a la de 2021, aunque advierte que votará menos gente. Cumpliendo un rol parecido -que fue malo- al de aquel año, considera que podrá revalidar el número de bancas que tiene en la cámara alta, que ocupan Pablo Obeid y Gabriela Demaría.
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Gustavo Pulti (MDF) y Fernanda Raverta (La Cámpora).
Los números que hace el peronismo
El piso para acceder a una banca es del 20%. Tomando como referencia la elección de 2021, la que determinó el reparto legislativo en la cámara alta, son unos 160 mil votos. En 2023, el peronismo (Encuentro Marplatense) sacó 141.788 sufragios solo en Mar del Plata, por lo que cree que repitiendo ese desempeño podrán mantener la representación de dos escaños. Históricamente, la fuerza ganadora se quedó con tres bancas y la segunda con dos.
Ante la versión cada vez más fuerte de que la alianza PROlibertaria sería encabezada por el jefe comunal de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro (PRO), se especula con que el segundo lugar de la lista sería para una mujer de LLA y la tercera, para alguien del círculo del intendente; el primer nombre que suena es Alejandro Rabinovich, quien buscaría la reelección.
Al mismo tiempo, podría resultar determinante lo que decida hacer la UCR, conducida por Maximiliano Abad, un dirigente con mucho peso en la Quinta. Si se sumara a ese espacio prolibertario y el mileísmo decidiera repartir los primeros tres lugares entre el PRO y LLA, al radicalismo oficialista le quedaría el cuarto lugar. Pésimo negocio para la tropa boinablanca que compitiendo por su lado parecer estar en condiciones de asegurarse una banca.
El peronismo se cree competitivo y, lo dicho, se conformaría con mantener sus dos asientos en la Legislatura. El optimismo crece si el radicalismo finalmente no se sube al acuerdo PRO-LLA y encara una aventura centrista, lo que entusiasma al kirchnerismo con disputar mano a mano la elección. Cree que la UCR le quitaría un buen caudal de votos a LLA, sobre todo en los 12 distritos que gobierna en la sección, entre los que se encuentra Tandil, con más de 116.000 personas habilitadas para votar y donde pesa el histórico jefe comunal radical Miguel Lunghi.
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Juan Pablo De Jesús, diuputado de Unión por la Patria.
La clave es la unidad
Por supuesto que ninguna especulación puede soslayar la situación que atraviesa el peronismo con la confirmación de la condena de Cristina Fernández de Kirchner. Los encuentros que las distintas expresiones de la fuerza vienen manteniendo podrían traducirse en una unidad que por defecto derramará hacia los armados seccionales y locales.
En ese marco, todos entienden que el clima no da para dos listas y que todo debería ordenarse, pese a los tambores de guerra que suenan en las trincheras camporistas y kicillofistas. Tras la derrota en la elección de 2023, el Frente Renovador y el vecinalismo de Acción Marplatense, conducido por el exintendente de ese distrito Gustavo Pulti, tomaron caminos separados. Sin embargo, el kirchnerismo agrupa en la ciudad cabecera a La Cámpora, el FR, el vecinalismo, la mayoría de los gremios de la CGT, sindicatos pesados como el SMATA, La Bancaria, la UOM y la agrupación Descamisados, entre otros.
Los exponentes más fuertes del peronismo en la sección son la ex titular del ANSES Fernanda Raverta; el diputado bonaerense Juan Pablo De Jesús; Pulti, Demaría, Obeid y la diputada Marcela Basualdo. El massismo alista al ex intendente de General Alvarado Germán Di Césare, el exdiputado provincial Juan Manuel Cheppi y Ariel Ciano. La lista sigue, pero entre el ravertismo y el exalcalde del Partido de La Costa suelen pasar las definiciones. No obstante, insisten, todo se decidirá en función de lo que pase en la cúpula nacional.
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Qué pone en juego la Quinta sección
La región renovará cinco bancas del Senado, hoy representadas por dos radicales (Ariel Martínez Bordaisco y Flavia Delmonte), dos peronistas (Obeid y Demaría) y un PRO (Rabinovich). La UCR tiene una fuerte presencia en la sección con 12 intendentes. Tendrá el desafío de retener esas dos bancas en la cámara alta, amenazadas por el posible acuerdo prolibertario, que buscará arrebatarle al menos una.
En 2023, el frente electoral que unió al kirchnerismo y al vecinalismo del exintendente Pulti venció con el 35% de los votos a Juntos por el Cambio, que quedó sólo un punto por detrás. LLA terminó tercera con el 26%, de manera que si se repitieran esos números la alianza entre macristas y libertarios ganaría cómoda la elección. Si eso se traduce en bancas legislativas, el peronismo tendrá el desafío de retener lo que tiene o bien esperar que el radicalismo no cierre en la alianza y animarse a ganar la elección.