En un acto en la Quinta de San Vicente, el ministro ex-Cámpora cuestionó a los enemigos internos del gobernador. Liderazgo de CFK, intermediarios y “sobredosis de estrategia”.
Andrés Larroque en San Vicente (X)
En un escenario emblemático para el peronismo, la Quinta de San Vicente donde vivió Juan Domingo Perón, el ministro Andrés Larroque sacudió este fin de semana la interna del oficialismo bonaerense, al enviar un mensaje contra quienes desde ese espacio político "conspiran" contra el gobernador Axel Kicillof. "En alguna joda rara están", disparó.
El titular de Desarrollo de la Comunidad y exsecretario general de La Cámpora, la agrupación liderada por Máximo Kirchner, también apuntó contra quienes buscan intermediar en el liderazgo de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner "a través de WhatsApp". “¿Qué es la conducción de Cristina? ¿Que tres ñatos te manden un WhatsApp?”, reprochó Larroque y amplió: “No quiero esa conducción de Cristina, quiero la conducción con movimiento popular".
"Algunos van a morir de sobredosis de estrategia", avanzó Larroque aunque sin dar nombres, quien habló en un acto junto al gobernador para conmemorar el aniversario del 13 de abril de 2016, cuando La Cámpora y el kirchnerismo marcharon a los tribunales de Comodoro Py bajo la lluvia para acompañar a CFK, convocada a declarar por el juez Claudio Bonadio.
En medio de las tensiones que mantienen Kicillof y Kichner, Larroque habló de un "momento delicado" y disparó contra quienes desde su propio espacio "conspiran contra Axel".
"Milei señaló a Axel como el enemigo, cuando hemos retenido heroicamente la provincia de Buenos Aires, y quizá no necesariamente con toda la colaboración de nuestra fuerza política. En este momento, si hay un compañero que tiene esa capacidad, cualquier compañero o compañera de nuestro espacio que ose murmurar, conspirar, sembrar cuestionamientos extraños en una joda rara está y no juega a favor del peronismo”, lanzó.
A la relación siempre tirante con La Cámpora, Kicillof sumó en los últimos tiempos una guerra fría con Sergio Massa, el líder del Frente Renovador que el año pasado conquistó la candidatura presidencial de un peronismo que llegó atado con alambre a la elección.
Como contó Letra P en Novena Sección del 16 de marzo, las tensiones entre Tigre y La Plata escalaron en la pelea por los cargos, pero también revelaron diferencias que siembran dudas para 2025.
En las filas de Massa desplegaron reclamos de todo tipo dirigidos al gobernador, tanto por los espacios que le dio al Frente Renovador en la estructura del gobierno como en la “falta de gestos” políticos del mandatario hacia una fuerza que se jacta de haberlo “empujado” para conseguir la reelección. Como prueba exhiben que Massa presidente obtuvo más votos que Kicillof gobernador.
Fiel a su estilo, el mandatario se aleja de todo tipo de disputa interna con cualquier tribu del espacio. Con todo, es notoria la metamorfosis del gobernador, quien continúa esquivando hablar de futuro para centrarse en la gestión, pero, a diferencia de otros tiempos, no hace nada para frenar el clamor incipiente que lo ubica en 2027.