Con el futuro gabinete del gobernador electo de Santa Fe Maximiliano Pullaro prácticamente sellado, el único sector de los partidos mayoritarios del frente Unidos que quedó fuera del reparto ministerial es el PRO que conduce el diputado Federico Angelini. Dos internas no zanjadas y una elección que puede cambiar todo.
Pullaro admitió desde el vamos que a la cúpula de Unidos la integran su UCR, el socialismo y el PRO. Los restantes doce partidos de la flamante coalición corren por detrás. El radicalismo, como contó Letra P en más de una oportunidad, se quedará con el grueso de los ministerios, ocho de once.
A la hora de coparticipar con el socialismo, Pullaro –como también reveló Letra P – les pidió a dos tribus internas del PS, las lideradas por Clara García y Antonio Bonfatti, que le entregasen una propuesta de unidad. Al no ocurrir, el mandatario electo acordó Ambiente para la primera en la figura de Enrique Estévez y Cultura para el segundo en la persona de Susana Rueda.
Con el PRO, en cambio, la situación se tensó aún más. Por un lado, porque Pullaro se apoyó sobremanera en su vicegobernadora Gisela Scaglia, con quien entablará un cogobierno, según sus dichos. La exdiputada, entonces, tiene la botonera de los amarillos en el futuro gabinete.
Como primera medida, Scaglia se quedó con el Ministerio de Trabajo y Empleo, que será para el concejal de Reconquista Roald Báscolo, una persona de su extrema confianza. Y empezó, por otro lado, a negociar con el sector de Angelini su incorporación al gabinete. Desde el entorno de la compañera de fórmula de Pullaro le confiaron a Letra P que hizo “varias” ofertas.
El diálogo está abierto, pero Angelini y compañía no comparten el criterio de Pullaro de considerar a Scaglia como la nueva jefa del PRO en Santa Fe. Esa interna, la amarilla, pese a las charlas y negociaciones, no está zanjada.
No quedó allanada, a la vez, la relación entre Pullaro y Angelini luego de las PASO provinciales. El diputado PRO fue compañero de fórmula de Carolina Losada, rival del ganador, quien eligió como estrategia un enfrentamiento encarnizado a base de acusaciones insolventes. Aquella interna tampoco está zanjada.
Desde el angelinismo admiten la existencia de charlas informales, tanto con Pullaro como con Scaglia. Pero aseguran que por el momento están más concentrados en la elección presidencial del 22 de octubre, donde apuestan con los ojos cerrados por Patricia Bullrich. El primer candidato a diputado en la lista de Juntos por el Cambio es José Núñez, angelinista de ley.
Nadie quiere tensar con un gobernador electo que superó el millón de votos, una cifra histórica para Santa Fe. Pero a esta hora, Angelini no tiene ministerio. “Confiamos que será equitativo entre las fuerzas, creemos en la unificación de criterio y que se va a respetar el espíritu con el cual se creó el frente”, deslizan desde el sector interno del PRO.
Así se abrazan a dos escenarios, uno en el que Pullaro no haya cerrado el esquema que salió a la luz este martes. “No está cerrado”, aseguran los PRO. Por el otro, el ingreso de Bullrich al ballotage le daría al angelinismo un impulso y aire fresco que hoy no tiene. En ese marco, podría revalorizar sus cartas y dialogar con Pullaro en otros términos.