En la campaña electoral que lo llevó a ganar la gobernación, Rogelio Frigerio repitió que Entre Ríos es la “hermana pobre de la Región Centro”. Hoy, ya sentado en el Sillón de Urquiza, está obligado a repensar el concepto, o bien trabajar para revertir la posición entrerriana respecto de sus hermanas Santa Fe y Córdoba, con las que comparte el bloque regional.
Eligió para estar en el día a día de la alianza interprovincial a Jorge Chemes, el ruralista que tomó protagonismo con la Resolución 125 y luego fue diputado nacional.
Como presidente de la Región Centro Entre Ríos, Chemes le da una vuelta de tuerca a aquello de la "hermana pobre", para que en esa debilidad se encuentre una fortaleza. En diálogo con Letra P apuntó al perfil productivo diversificado de la provincia como la llave para “contrarrestar el potencial de Santa Fe y Córdoba”.
Por diversificación se refiere a la vasta gama de cadenas productivas de la provincia, comprendidas por las llamadas economías regionales. La más importante, integrada de punta a punta, es la avicultura, pero abarca también a los cítricos dulces, la miel, el arroz, la forestación, la porcinocultura y otros sectores menores.
En general con menor peso relativo en la Región y el país, son sectores productivos que a la hora de elevar reclamos o pedidos a la Nación no les significan grandes costos financieros. Aquí parte de la explicación sobre la conveniencia de la diversificación, no buscada.
La actual administración de la que es parte Chemes entiende que a la Región Centro le faltó protagonismo y sintonía de intereses en el anterior mandato de gobernadores por distintas situaciones. Por un lado porque el cordobés Juan Schiaretti “se cortaba solo”, como definió un funcionario de la anterior gestión. Porque el santafesino Omar Perotti quedó enredado en hacer arrancar su gestión. O porque Gustavo Bordet carecía de músculo político para planteos que fueran más allá de la provincia que gobernaba. Ahora el objetivo es darle “dinamismo”, según definen en el gobierno de Entre Ríos.
La sintonía entre Frigerio y Maximiliano Pullaro (Santa Fe) es evidente. En tanto, con Martín Llaryora (Córdoba) también hay entendimiento, aunque los cordobeses mantienen la tradición de jugar más solos. Algo que les permite la estructura productiva de su provincia, leen en Entre Ríos.
En la provincia se entiende que Córdoba tiene una fuerte vida propia. En tanto que con Santa Fe existen más objetivos comunes. De todos modos, Chemes habla de un “equilibrio en las decisiones políticas”. Y subraya que se toman “en conjunto” y “no de forma individual”. Lo resume así: “Hay más armonía”.
Mientras en lo coyuntural, por ejemplo la discusión de la Ley Ómnibus del presidente Javier Milei, cada provincia de la Región arriesga pedidos y condicionamientos de acuerdo a lo que le permite su propia espalda, hay otros planteos más de tono estructural que, dicen, trabajan juntos para darle impulso definitivo.
Es el caso de la Hidrovía, donde Entre Ríos y Santa Fe presionan fuerte para tener protagonismo en las decisiones. Si bien el desarrollo portuario de Santa Fe es indiscutible, el plan de Entre Ríos es desarrollar una estructura portuaria adaptada a la producción especifica entrerriana.
En la agenda conjunta figura trabajar en el llamado Corredor Bioceánico, en el que también talla Córdoba como parte del plan. El desafío es desarrollar más infraestructura, como el nuevo puente Paraná-Santa Fe, un proyecto que por la coyuntura queda lejano, pero que de ningún modo se abandonó.
La Región Litoral
Surgió, conocido de boca de Pullaro, la idea de armar la Región Litoral como una nueva alianza interprovincial, compuesta en principio por Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, gobernada por Gustavo Valdés, y Chaco, por Leandro Zdero. Cuatro gobernadores de Juntos por el Cambio. Sintonía absoluta. Esta iniciativa se mantiene, por ahora, en un diálogo de primer nivel. Son solo los gobernadores los que charlan para darle el trazo grueso antes de que la cuestión pase al funcionariado para afinar el encuadre.
Quién es Chemes
Chemes es, antes que nada, un productor rural. “Soy un tambero”, dice a modo de presentación para marcar desde dónde habla. Se curtió como dirigente agrario en las rutas, durante la guerra por la Resolución 125 y de ahí dio el salto a una banca convirtiéndose en agrodiputado nacional por el radicalismo entre 2009 y 2013.
En sus inicios participó de los grupos CREA, integró cámara de productores lecheros de la provincia, presidió la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (FARER) y llegó a presidir las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).