Luego de bloquear el dictamen de la reforma de la ley de asociaciones sindicales, que incluía un fuerte recorte al poder de los gremios, el bloque de La Libertad Avanza de Diputados solicitó al radical Martín Tetaz una tregua de 15 días para retomar el debate.
La negociación fue este jueves y el diputado de la UCR suspendió la reunión de la comisión de legislación laboral, que estaba prevista para este jueves a la 12. Se hará el martes 15 pero el dictamen recién llegaría una semana después.
El Gobierno tendrá todo el mes para continuar su negociación con la CGT, que inició con una reunión este lunes, en la que acordaron suavizar la reglamentación de la reforma laboral incluida en la ley ómnibus. A los gremios les preocupa la sanción por el bloqueo a empresas.
La reforma de la ley de asociaciones sindicales golpea en el corazón de los gremios, porque impide el cobro compulsivo de las cuotas de afiliados, un planteo que también hizo la UCR durante la ley ómnibus y no prosperó.
Consiste en prohibir descuentos en los recibos de haberes que no hayan sido consentidos por los trabajadores. La práctica habitual es que se debe renunciar a esos aportes, un trámite por demás engorroso.
La defensa de la CGT
Tetaz intentó sin éxito dictaminar la semana pasada, a partir de 29 proyectos presentados, de los cuales 28 buscan reducir el poder de los gremios. El único para fortalecerlo es el de Hugo Yasky (UP), quien plantea la protección para los delegados sindicales.
El diputado radical tenía un dictamen consensuado, en el que además de eliminar la cuota sindical se garantiza la participación de las minorías en los consejos directivos y se establece un cupo femenino e impide las reelecciones, un tiro de gracia a las históricas cúpulas sindicales. Además, los obliga a presentar las declaraciones juradas.
Durante el debate en comisiones, Héctor Daer, uno de los jefes de la CGT, defendió esa práctica. "De la misma manera que se pretende desarticular la relación entre una organización sindical y el no afiliado, una empresa puede decir ‘yo no pertenezco a la cámara’ y así no hay convenio colectivo de trabajo. Ese es el fundamento final de desactivar estas relaciones”, denunció el sindicalista.
El texto que escribió Tetaz también prohíbe la candidatura a cargos sindicales de quienes tengan procesos penales en curso y obliga a publicar el patrimonio de cada gremio con información actualizada.
El último capítulo plantea la flexibilización de las obras sociales, con la opción de los trabajadores de transferir aportes a otros proveedores de salud, después de tres meses derivar aportes al de su actividad.
La tregua
En el radicalismo tienen el respaldo del PRO para dictaminar, pero sin los votos de LLA no alcanzan con las firmas y el debate podría caerse. El plan del partido centenario, llegado el caso, es exponer al oficialismo en su acuerdo con la CGT y arruinar el relato sobre el combate de la casta.
"Tenemos la chance de modificar una legislación después de 40 años y Milei se alió al sindicalismo", dijo Tetaz la semana pasada, cuando tuvo que suspender la reunión de comisión, por un aviso de la diputada libertaria Alida Ferreyra.
En el PRO la indignación fue mayor, porque sus referentes se enteraron un día antes en la Casa Rosada de que el Gobierno estaba negociando con los gremios. El interlocutor era Gerardo Martínez, de la UOCRA, de buena relación con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos.
El bloque conducido por Cristian Ritondo emitió un comunicado a favor de la reforma sindical y lo planteará cuando haya una reunión de comisión, si es necesario, exponiendo la sociedad entre Milei y la CGT, de la que no forma parte. Sería un punto más de tensión entre ambas fuerzas, que se piensan aliadas en las elecciones 2025.