Un año después de que el Poder Ejecutivo enviara al Congreso el proyecto de creación de un Sistema Integral de Cuidados, este martes comenzará a tratarse en las comisiones de Legislación del Trabajo, presidida por Vanesa Siley, y de Mujeres y Diversidad, cuya titular es Mónica Macha. Aunque la base será el proyecto que anunció el presidente Alberto Fernández en la apertura de la Asamblea Legislativa 2022, el debate será dividido entre cuidados comunitarios, licencias y sistema de cuidados.
Hasta ahora, el proyecto redactado por una Comisión de especialistas y representantes de organizaciones de la sociedad civil convocada por el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad cuando su titular era Elizabeth Gómez Alcorta, no tenía acuerdo ni siquiera dentro del bloque del Frente de Todos. Según pudo saber Letra P, el 10 de mayo, en una reunión sobre el tema organizada por el PJ nacional, en la que participaron referentes de diferentes sectores del Frente de Todos (40 de manera presencial y más de 80 de manera virtual), se llegó a un consenso para iniciar el tratamiento. Fue la diputada María Rosa Martínez quien anunció ahí mismo que se llamaría a reunión conjunta de comisiones en Diputados.
Con el plenario del martes arrancarían los contactos con los otros bloques para avanzar. En principio, intentarían acordar un nuevo sistema de licencias por maternidad y paternidad, que modifique la cantidad de días de cada progenitor y tenga en cuenta las familias diversas y adoptantes. Hoy existen alrededor de 34 proyectos sobre el tema y desde la recuperación de la democracia se presentaron más de 100. Luego se abriría la discusión sobre el Sistema Integral de Cuidados y lo que dividía aguas inclusive dentro de la coalición gobernante: el presupuesto.
La desigualdad
Según datos oficiales publicados en 2020 por la Dirección Nacional de Economía y Género del Ministerio de Economía, las tareas de cuidado representan el 16 por ciento del PBI en la Argentina.
“Cinco de cada diez mujeres no tienen trabajo remunerado ni lo buscan, mientras que sólo ocurre esto en tres de cada diez varones. El desempleo de las jóvenes duplica al promedio nacional. Las mujeres también tienen mayores tasas de informalidad y trabajan menos horas por semana que las deseadas. El resultado es una brecha de los ingresos del 26% y que seis de cada diez personas pobres son mujeres. Esta desigualdad se traduce en peores condiciones para enfrentar la vejez: solo la mitad de las mujeres cuenta con los aportes necesarios para obtener la jubilación, solo uno de cada diez logra tener más de 20 años de aporte al momento de la jubilación”, escribió la especialista Delfina Schenone Sienra de Equipo Latinoamericano de Justicia y Género en Letra P. “Nada de esto se explica sin ver el lado B del trabajo: el no remunerado, invisible, silencioso, que transcurre todos los días, que sostiene nuestra vida y a nuestra economía pero que no entra en ninguna cuenta. Ese trabajo que en un 76% recae sobre las mujeres.”
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Ayelén Mazzina, actual ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad, asumió con el compromiso de impulsar el tratamiento del proyecto Cuidar en Igualdad. Cuando se confirmó el plenario de comisiones, sostuvo: “Las tareas de cuidados están en la fibra de nuestra sociedad. La organización de nuestra economía, de nuestro trabajo, de nuestra vida social se sostiene en la forma que organizamos los cuidados. Por eso es que su distribución tiene que ser justa. Porque hablar de cuidados es hablar de justicia social”.
“No queremos una ley que sea una cáscara vacía, queremos una ley que le cambie la vida a la gente”, sostuvo una de las personas que impulsa la ley en la Cámara baja. Si efectivamente se logran los consensos para la aprobación en Diputados y hay acuerdo con el Senado, será la segunda promesa electoral –la otra fue la legalización del aborto- que esta gestión le hace al movimiento de mujeres y que cumple.
