El ingreso del gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, a Juntos por el Cambio(JxC) se disputará en tres canchas, con partidos que deberán jugarse antes del 14 de junio, plazo legal para el cierre de alianzas. Con las capitanías visibles de Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, las formaciones de ambos equipos van tomando forma. El primer match posible, al que apuesta el jefe de Gobierno porteño, es a un cambio de reglamento de la mesa de la coalición para forzar la aprobación del desembarco del mandatario cordobés, que este lunes ni llegó a tratarse en el frustrado cónclave. A la vez, el presidenciable PRO hace un poroteo también para llevar el tema al Consejo del partido amarillo, donde cree contar con los votos para imponerse; al igual que Gerardo Morales confía en tenerlos para aprobar la idea en la convención radical del próximo lunes.
Debajo de ambos presidenciables comenzaron a alinearse los jugadores. Mauricio Macri irrumpió este martes, del lado bullrichista, el mismo team donde se anota el radical Alfredo Cornejo, contrincante del titular de la UCR. El hombre fuerte de la Coalición Cívica, el diputado Maximiliano Ferraro, se suma al pelotón de quienes avalan la jugada.
Bullrich, Macri y Cornejo creen que tienen el tiempo de su lado, ya que sólo quedan ocho días para concretar ese acuerdo antes del cierre de alianzas. Morales y Ferraro ya le dejaron saber a Larreta que no están de acuerdo con las formas que tiene el PRO de secar los trapos sucios al aire libre. Incluso en la Coalición Cívica consideraron como “vergonzoso” el accionar del macrismo por exponer las internas a cielo abierto en el encuentro de presidentes de JxC.
Para salir del laberinto por arriba, Larreta reservó una cancha para disputar el partido con una parte de la UCR y la CC, a quienes se sumaría Encuentro Republicano de Miguel Ángel Pichetto: solicitar que se cambie el reglamento de "buenas prácticas" de la coalición que exige que los cuatro titulares partidarios estén de acuerdo para poder oficializar una nueva alianza. “Vamos a seguir buscando el acuerdo en la mesa de JxC”, le dijo a Letra P uno de los armadores del jefe de Gobierno porteño. Con el PRO dividido, la llegada de Schiaretti ya contaría con tres votos.
El césped amarillo
La otra cancha lista para la competencia es el Consejo Nacional del PRO, que aún no fue convocado. Ese órgano de 40 integrantes, compuesto por quienes encabezan los partidos a nivel provincial y por la dirigencia orgánica nacional, podría rever el mecanismo que ya se acordó para la negociación de alianzas. Hace dos semanas, el partido aceptó que el titular del partido, el diputado Federico Angelini, y el secretario general y de Proyección Federal de la Ciudad, Eduardo Macchiavelli, fueran los negociadores, pero en el expediente José Luis Espert no se pusieron de acuerdo.
Larreta está confiado de tener los voluntades para imponer su postura, con el reciente antecedente de la votación con la que se recortaron las facultades de la presidencia amarilla frente a las intervenciones en las provincias de Tierra del Fuego y Salta. A diferencia del tema Schiaretti -aunque la excusa formal será la inclusión aún no debatida de Espert- es que en la anterior sesión no hubo una oposición tan fuerte de Macri. “Iremos buscando las maneras porque estamos convencidos”, remarcaron en Uspallata.
También para Macri la situación es compleja, ya que el exmandatario buscó incluir a Schiaretti en 2019 cuando le ofreció que fuera su compañero de fórmula. Ante el rechazo del gobernador cordobés, terminó imprimiéndose en la boleta el nombre de Pichetto. “En el fondo esto es una pelea entre el expresidente y el jefe de Gobierno para ver quién tiene el poder realmente”, remarcó un veterano dirigente del PRO que mira desde afuera este conflicto.
El césped radical
La tercera cancha que puede definir el partido es ajena al PRO. Como adelantó Letra P, una parte del radicalismo venía insinuando el acuerdo con el Peronismo Federal, con la cita en agenda de la convención nacional fijada para el lunes. Morales no necesitará incluir el factor Schiaretti en el temario formal, ya que el radicalismo cordobés pidió que se debatiera la inclusión. El lunes por la tarde, el comité de la provincia mediterránea le envió una carta al presidente de la Convención, Gastón Manes, para que se rechazara un posible acuerdo con el gobernador. Ambos equipos están convencidos en ganar esa votación.
En cualquiera de esas tres canchas se definirá el partido dentro de la coalición que no es sólo por Schiaretti, sino por ver quién se corona campeón dentro de la oposición.