Las encuestadoras reflejaron el clima de extrema polarización que marcaría el domingo electoral en la ciudad de Córdoba, pero no pudieron anticipar al ganador. El peronista Daniel Passerini, que supuestamente venía detrás, se impuso por siete puntos al radical Rodrigo de Loredo. Las nueve listas restantes, que también protagonizaron el proceso, intentaron colarse en un baile de dos. Laura Vilches, del Frente de Izquierda y Trabajadores Unidad (FITU), logró el tercer puesto y mantendrá su banca en el Concejo Deliberante.
Ingresaron al recinto de la ciudad por primera vez en 2019. Aquella vez la dispersión de la oferta electoral fue la clave, pero el 3,8% por ciento de los votos, también. Esta vez, la performance en las urnas fue más baja, de 2,89%, pero suficiente para mantener la representación. El desafío era doble porque pidieron el "voto bronca" que podía expresarse a su vez en la versión libertaria de Verónica Sikora, quinta en la tabla.
“Después de una enorme campaña militante dejando tripas y corazón a fuerza de convicciones profundas, la única banca independiente de las dos grandes coaliciones tradicionales es para el Frente de Izquierda y Trabajadores Unidad. ¡Gracias a quienes nos acompañaron!”, festejó la dirigente feminista.
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El próximo Concejo
De esta manera, el recinto legislativo quedará divido en tres. Conforme a la Carta Orgánica municipal que otorga a la fuerza ganadora la mayoría automática, Hacemos Unidos por Córdoba, contará con 16 escaños; mientras que Juntos por el Cambio tendrá 14 y el FITU, uno.
El cuerpo será presidido por Javier Pretto, el expresidente del PRO que dejó las filas amarillas para subirse a la propuesta transversal del gobernador electo, Martín Llaryora.
En la ronda de entrevistas de la mañana del triunfo, el intendente electo se definió como un “bilardista” al ser consultado sobre su futuro gabinete. “Equipo que gana, no se toca”, ratificó Passerini. Por lo tanto, el bloque oficialista sufrirá algunos reacomodamientos por varios de las figuras anotadas en la lista son funcionarios y funcionarias de la administración de la Municipalidad de Córdoba.
La alianza opositora tendrá expresiones de todos los núcleos internos de la UCR. Tal había sido el propósito de De Loredo al momento de apuntar los nombres para garantizarse un funcionamiento equilibrado del cuerpo en caso de acceder al gobierno local. Con dominio radical, el Frente Cívico estará representado por Graciela Villata y Martín Juez; y el PRO, por el baldassista Gabriel Huespe y Jessica Rovetto.
Con la confirmación de que el peronismo seguirá gobernado la Provincia y la ciudad, la oposición cargará con la responsabilidad de sostener la unidad, también en el recinto ubicado sobre calle Pasaje Comercio.
