Había terminado el acto conmemorativo por el Día de la Bandera en la plaza Manuel Belgrano de la pintoresca ciudad de Villa Allende. El candidato a intendente de Hacemos Unidos por Córdoba, Nicolás García, pispeaba la carne por la ventanilla del horno, cuando escuchó el sonido sostenido del timbre de su casa. Colgó el delantal, se secó las manos con el repasador de toalla y atendió.
En el zaguán de la casa estaba la sucesora de Eduardo “Gato” Romero, María Teresa Riu-Cazaux De Vélez (en adelante, De Vélez), con una exigencia puntual. “Pensamos diferente, Nicolás”, fue el remate al pedido de renuncia.
García era el hombre fuerte del gabinete del exgolfista que llegó al gobierno de su ciudad natal de la mano de su amigo, el entonces jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri. Era muy común escuchar al intendente, fallecido en febrero de 2022, decir “manejalo con Nicolás”. La confianza en su secretario de Gobierno era total.
Cuando De Vélez asumió las responsabilidades de Romero, reubicó a García en Desarrollo Social y colocó en las patas políticas del gabinete a personas de su confianza. La tensión fue permanente y se fue agudizando con la llegada del año electoral.
El peronista Martín Llaryora olfateó la sangre amarilla y envió a su alfil, el diputado Ignacio García Aresca, a entonar las estrofas de la transversalidad. García aceptó y cruzó al peronismo cordobesista, sin desafiliarse del PRO. Pidió licencia hasta el 31 de julio, un día después del domingo electoral de Villa Allende, ciudad estratégica del llamado cordón de Sierras Chicas.
De Vélez había aceptado el pedido de licencia de García, pero esa mañana -entre banderas y chocolate caliente- cambió de opinión. Tocó el timbre -¡Ring!- y lo rajó.
La gran manzana de Schiaretti
El candidato a intendente de la ciudad de Córdoba por Juntos por el Cambio, Rodrigo de Loredo, eligió manzanas coloradas como objeto protagonista de su campaña política. El gobernador que quiere ser presidente, Juan Schiaretti, también apelará a una gran manzana, pero no las rionegrinas, sino la de Nueva York.
En la que debería ser su primera semana oficial de proselitismo, después del doble lanzamiento electoral en Buenos Aires y en su provincia, el gobernador que quiere ser presidente viajará a Estados Unidos este domingo. La estadía será larga en un momento donde parece que la atención debería estar puesta en cosechar votos antigrieta a lo largo y ancho del país.
Por siete días, cumplirá una agenda “programada” en un foro político de alto nivel de Naciones Unidas (High-Level Political Forum on Sustainable Development) y mantendrá reuniones con inversores de JP Morgan, entre otras.
De la partida será la senadora Alejandra Vigo; la ministra de Coordinación de la Provincia, Silvina Rivero; y el secretario de Comunicación, Marcos Bovo.
A cargo de la campaña de Hacemos por Nuestro País quedará el lugarteniente de Schiaretti, el diputado Carlos Gutiérrez, que tendrá que ingeniárselas para lidiar con el candidato presidencial a miles de kilómetros.
Figuritas repetidas
Horacio Rodríguez Larreta regresó a Córdoba con el firme objetivo de demostrar que su affaire político con Schiaretti no le espantó a toda la dirigencia radical. Logró una foto completa, con varios nombres con peso específico. En el búnker de su contrincante, Patricia Bullrich, relativizaron la pesca.
“Varios de los intendentes e intendentas radicales que posaron en el asado de Río Tercero van a estar con Patricia en pocos días”, retrucaron.
Habrá que esperar la visita de la ex ministra de Seguridad a la provincia para comprobar los “cruces” de la lista difundida por alfiles del alcalde porteño. Será el 18 de julio, a pocos días del cierre de campaña capitalino.
La primera figurita que se repetirá es De Loredo. Está pactada una actividad conjunta que, es probable, termine sin ningún guiño hacia la presidenciable, como ocurrió con Larreta. La diputada amarilla Laura Rodríguez Machado ya organiza el encuentro con radicales que seguirá después. Promete sala llena.
“Los únicos intendentes e intendentas que están condicionados son los que están en las listas para Diputados”, insisten con el juego libre territorial y dan una puntada más.
Al parecer, la competencia que está por comenzar ya no es por el municipalismo. La apuesta de la jefa del PRO será, en adelante, abrir la lucha por los apoyos del sector productivo cordobés.
Ya reservó el Estadio Quality para sentar a figuras del mundo empresarial como cierre de su gira cordobesa. Anticipan que serán mil en total.