Guillermo Francos tendrá como primer invitado a su despacho del Ministerio del Interior a Martín Llaryora, el flamante gobernador de Córdoba, la provincia en la que Javier Milei hizo todas sus apuestas para ganar el ballotage presidencial. El sucesor de Juan Schiaretti será el primero de una serie de citas que el funcionario libertario debió agendar mientras los mandatarios provinciales aguardan conocer la letra chica del paquete de urgencia anunciado por Toto Caputo, una incertidumbre que atraviesa a los enrolados tanto en Juntos por el Cambio (JxC) como en el peronismo.
"Vamos a reducir al mínimo las transferencias discrecionales del Estado nacional a las provincias, recursos que, lamentablemente, en nuestra historia reciente se ha usado como moneda de cambio para intercambiar favores políticos, para hacer política", prometió el ministro de Economía en su mensaje regrabado del martes. Las dudas del plan corrieron como un reguero de pólvora en las provincias, a la espera de la letra chica del Caputazo.
Con el traspaso del manejo de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) de Interior al Palacio de Hacienda, decretado en la nueva ley de ministerios, los gobernadores olfateaban que la motosierra pasaría por ahí. En el ejercicio 2023, esos fondos ascendieron a $173.000 millones, que fueron utilizados en las últimas semanas para garantizar el pago de aguinaldos.
Más allá de ser un recorte de poder, en la Casa Rosada se analizaba desde otra óptica: se pondrá en práctica el juego del policía bueno y el policía malo entre Francos y Caputo. La lógica es que si no hay fondos para repartir, mejor que la distribución de las migajas la haga otro. Para la contención, estará el funcionario político.
En Interior no hablan en esos términos, si bien admiten que desde la campaña el rol de Francos fue mantener el dialogo político con las diferentes figuras del sistema, una especie de embajador libertario en territorio peronista y cambiemista. Este miércoles, mientras agendaba la cita con Llaryora, el ministro del Interior recibió a Daniel Catalano, de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) porteña, preocupado por la revisión de los contratos. Sin embargo, la secretaría de Trabajo quedó bajo la órbita de Capital Humano, que comanda Sandra Pettovello.
Campaña por la Boleta Única
Francos está afilando su propia motosierra. Después de adelantarle al diario La Nación que el mileísmo apostará por la eliminación de las PASO, este miércoles el ministro enarboló otra bandera electoral bajo la idea del ahorro: la Boleta Única. De visita en la Cámara Nacional Electoral (CNE), el funcionario propuso: “Debemos generar los consensos necesarios y trabajar con aquellos que transitaron estos 40 años de democracia para cambiar el sistema e ir por uno de Boleta Única”.
"Es increíble que no hayamos sido capaces de cambiar este sistema donde un elector llega a un cuarto oscuro y se encuentra con 500 boletas de partidos. El sistema de Boleta Única no solamente termina con este gasto de dinero sino también con la confusión que muchas veces se genera", apuntó Francos.