El acuerdo para aprobar en la Legislatura bonaerense un endeudamiento por el equivalente en pesos a 150 millones de dólares que le permitiría al gobierno de Axel Kicillof cerrar el año sin inconvenientes financieros estaba encaminado, pero un llamado hizo volar la negociación por los aires e impidió que el oficialismo reuniera el cuórum para sesionar entrada la noche del miércoles. El gobernador le apunta al jefe de Gobierno electo de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri. Detrás del ex intendente de Vicente López ve la sombra del expresidente Mauricio Macri.
Durante la jornada del miércoles hubo negociaciones y reuniones cruzadas para alcanzar un acuerdo que le permitiera a Kicillof aprobar la autorización para endeudarse. Los intendentes de Juntos por el Cambio le reclamaban al gobernador los $18 mil millones que la provincia les debe a los municipios. Era el precio para aportar sus votos. Con el correr de las horas se acordó que la administración provincial transfiriera una primera parte de ese monto inmediatamente y se comprometiera a transferir el resto antes de fin de año. La respuesta fue un sí. Sin embargo, todo se embarró.
Una fuente del entorno más cercano al gobernador, que estuvo en el minuto a minuto de la negociación, apuntó directamente al alcalde porteño electo: “Están midiendo quién conduce al PRO y Jorge Macri quiere conducirlo desde la Ciudad”, aseguró. En esa misma línea, otro funcionario bonaerense dialogó con Letra P y contó que "un llamado del ex intendente de Vicente López trabó las tratativas" y mencionó que detrás de esa comunicación estuvo la mano del expresidente.
“Ellos están dirimiendo su interna y no tienen jefatura. Aún con la disposición de avanzar en el pago de las deudas a los municipios no nos garantizaban que se sentaran, por eso quedó todo en stand by. En el tironeo interno se llevaron puestos los avances que tenía una parte de la coalición”, explican en Calle 6. Desde el entorno del electo alcalde porteño se desligan de la acusación: "No tiene nada que ver con la situación de la provincia de Buenos Aires", respondieron ante la consulta de Letra P.
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A su vez, fuentes del Ejecutivo provincial resaltan que con el radicalismo “estaba todo cerrado” y que los jefes comunales del partido centenario estaban “muy calientes" con el PRO. “Lo que pasa es que los intendentes del PRO del conurbano y Mar del Plata no necesitan tanto los fondos porque subejecutaron sus presupuestos y no les importan los municipios más chicos que no pueden cerrar el año”, añaden cerca de Kicillof.
Con todo, en el oficialismo aseguran que “la comunicación no está cortada con nadie” y que seguirán trabajando para lograr la aprobación del proyecto en el Senado y en Diputados. El ministro de Hacienda y Finanzas, Pablo López; y la secretaria General, Agustina Vila, están llevando adelante las negociaciones en representación del Ejecutivo provincial. En la Legislatura están al frente la vicegobernadora Verónica Magario y la presidenta del bloque oficialista, Teresa García. Por su parte, el radicalismo se reunirá este jueves a las 15 en el anexo del Senado para definir una postura.
