Alberto Fernández puso en la superficie un tema hipersensible que se discute en privado en los círculos de de poder. El expresidente le adjudicó "alteraciones psicológicas" a su sucesor, Javier Milei.
El expresidente salió a responder al jefe de Estado. "Mi perro no me aconseja (y está vivo)" y "las fuerzas del cielo no me mandan señales", escribió.
Alberto Fernández puso en la superficie un tema hipersensible que se discute en privado en los círculos de de poder. El expresidente le adjudicó "alteraciones psicológicas" a su sucesor, Javier Milei.
En un mensaje que publicó en Twitter, Fernández se defendió de lo que consideró un ataque presidencial a su persona. Tras negar haber sido "un títere" de Cristina Fernández de Kirchner durante su paso por la Casa Rosada, dijo que a él no lo "aconseja" su perro, que además "está vivo"; que no recibe "señales" de las fuerzas del cielo y que sus "acciones y reacciones" surgen de "la reflexión y no de alteraciones psicológicas".
"Si el presidente se refirió a mí llamándome 'títere' quiero decirle que no lo soy, no lo fui ni lo seré. También debe saber que mi perro no me aconseja (y está vivo), que las “fuerzas del cielo” no me mandan señales y que mis acciones y reacciones son el resultado de la reflexión y no de alteraciones psicológicas", escribió el exmandatario.
Este portal viene señalando que el "carácter" del Presidente, como se hace referencia en Estados Unidos al estado emocional de quienes conducen el gobierno, es un tema hipersensible que se analiza en círculos políticos y empresariales.
El asunto de los perros del mandatario es tabú en la Casa Rosada. Milei suele decir que todas las mañanas juega con cinco ejemplares de la misma raza canina, pero en las fotos se lo ve con cuatro. Esta semana, el vocero presidencial, Manuel Adorni, fue consultado con una pregunta concreta: ¿en la quinta de Olivos viven cuatro o cinco perros? El portavoz respondió que hay tantos como el Presidente dice que hay.
Antes, en su artículo ¿Qué tiene Milei en la cabeza?, Marcelo Falak escribió en Letra P: "Si no fuera por la ley de hierro de la comunicación presidencial, que consiste en no hablar jamás sobre los perros de Javier Milei, a esta altura se sabría algo tan simple como si son cinco o cuatro. 'Cinco', dice el Presidente, que menciona entre ellos a Conan, presunto clon del can homónimo muerto en 2017. 'Cuatro', replican biógrafos y periodistas que aseguran tener buena información al respecto".
En la misma nota, señaló: "Conocer ese dato permitiría despejar de una buena vez la duda más ácida acerca del estado de Milei, o todo lo contrario. Mientras se esperan certezas y dado que los telediagnósticos no constituyen prácticas médicas ni periodísticas recomendables, corresponde analizar algunas de las definiciones más recientes del ultraderechista, expresadas en un tono llamativamente exasperado y que deben ser calificadas, cuando menos, como controvertidas. Tal vez esto, lo que sí es palpable, sirva para responder la pregunta más importante del momento, omnipresente en la calle pero, por alguna razón, la que menos se plantea en la política: ¿las condiciones políticas, morales, intelectuales y anímicas de Milei son las adecuadas para el desempeño de la primera magistratura?".
La discusión prohibida sobre el estado emocional del Presidente volvió a tomar fuerza en la noche de este miércoles, durante la presentación de Milei en la cena de la Fundación Libertad. Ante el Círculo Rojo y frente a su par de Uruguay, Luis Lacalle Pou, el jefe de Estado desarrolló un show de stand up que incluyó burlas -deformaciones de su voz incluidas- a figuras como el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, a quien llamó "ese chico soviético que está en la provincia", y al economista Carlos Melconian.
En su posteo, Alberto Fernández dijo sentir temor de que el Presidente "se siga informando por Jumbo, bot", en referencia a la cuenta fake de Twitter que daba datos sobre supuestas deflaciones en alimentos, y tras defender el acuerdo que firmó su gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI), calificó el ajuste que aplica el Gobierno de "inhumano, brutal y fundamentalmente innecesario", dijo que es "falso el resultado fiscal que dice haber logrado con semejante ajuste y que dio a conocer en una cadena nacional penosa" y pidió que Milei deje de "mentir".