No fue solo por la foto: el expresidente Mauricio Macri y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se reunieron por primera vez en el año en el country de Cumelén, de Villa La Angostura, donde analizaron las disputas internas que se dan en varias provincias y coincidieron en la necesidad de aplicar "reformas profundas" en el caso de que Juntos por el Cambio (JxC) gane las elecciones presidenciales de octubre.
La situación del PRO frente a los socios de JxC se llevó la mayor parte de la charla, de acuerdo a lo que pudo reconstruir Letra P. Tanto Macri como Larreta quieren que el partido amarillo tenga libertad para negociar acuerdos con la Unión Cívica Radical (UCR) en las provincias.
El encuentro fue pautado para bajar tensiones en el PRO luego de las sospechas de ciertas figuras del PRO, que derivaron hasta en acusaciones, contra Patricia Bullrich por rubricar acuerdos con el radicalismo que beneficiarían su propia campaña presidencial.
Hace una semana, las autoridades partidarias de JxC se reunieron de urgencia para evitar las posibles rupturas en Mendoza, Chubut y Tucumán en medio de las discusiones por las candidaturas. En Neuquén, la separación de la coalición es un hecho dado que una parte de la UCR llevará al diputado lustosista Pablo Cervi como candidato a gobernador, mientras que el PRO se encolumnó detrás de Rolando Figueroa del Movimiento Popular Neuquino (MPN). "Macri fue quien decidió armar esa alianza", contó un dirigente del partido.
Para resolver las esquirlas que dejaron las peleas internas en esas provincias, la mesa nacional de JxC se reunirá el 6 de febrero de manera presencial. El objetivo es que todas las autoridades de la alianza opositora participen del cónclave para saldar las diferencias.
El segundo gran tema de las conversaciones entre Macri y Larreta fue el plan de gobierno que deberá poner en marcha JxC en el caso de resultar ganador de los comicios. Ambos están convencidos de que se tendrán que aplicar políticas de shock para superar la crisis económica.
“Hablaron largo de la importancia de hacer un cambio verdaderamente profundo para que la Argentina encuentre su rumbo, y de la urgencia de que ese cambio suceda ahora, sin postergaciones”, resumió, ante este portal, uno de los hombres de máxima confianza del expresidente.
La letra chica de esas medidas está guardada bajo siente llaves. Lo seguro, de acuerdo a lo que pudo trascender, es que el plan de estabilización que creen tiene que aplicarse tendrá que tener metas claras para bajar la inflación.