El fin de enero marcará no sólo una fecha en el calendario para la oposición. En la interna del PRO significó el mes en el que las dos principales figuras del espacio aceleraron sus respectivas campañas de cara a la interna presidencial que se avecina: la titular del PRO, Patricia Bullrich, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, están en la pista, ya compitiendo cabeza a cabeza.
La exministra de Seguridad estuvo en boxes los primeros 15 días del año, por sus vacaciones en Brasil, pero cuando regresó lo hizo de manera hiperactiva. Luego de la obligada salida del diputado Gerardo Milman de su mesa chica, al ser involucrado en la investigación del intento de magnicidio de Cristina Fernández de Kirchner, Bullrich puso nafta en la maquinaria aceitada que le armaron el legislador Juan Pablo Arenaza, el secretario de la Presidencia del PRO, Damián Arabia, y el coordinador de los equipos técnicos, Alberto Förhing. Este reducido grupo de colaboradores, que son los que le marcan la agenda al resto de las figuras que integran el equipo de Bullrich, se jacta de la que consideran la gran victoria fotográfica del verano: la instantánea que la exministra logró con el expresidente Mauricio Macri.
El bullrichismo cree que la imagen oficiará como el punto de inflexión en la disputa con Larreta. “Mauricio no se va a jugar de forma tajante, pero deja entrever que tiene mejor sintonía con nosotros que con el resto”, le dijo a Letra P uno de los integrantes de esa mesa chica que ya prepara sus recorridas en Córdoba y La Pampa.
La salida de Milman le proporcionó a la exministra un panorama bonaerense más claro: una de las consecuencias directas es que logró mejorar la relación con el intendente de Capitán Sarmiento, Javier Iguacel, que se erige, por ahora, como el único candidato puro de Bullrich para la provincia de mayor volumen electoral.
La necesidad de generar mayor peso en territorio bonaerense generó que tenga como próximo objetivo lograr un acuerdo con el diputado liberal José Luis Espert, que alejado de Javier Milei ya avisó que irá con boleta corta como candidato a gobernador. En los cálculos de Bullrich, que se nutren de sondeos de opinión, Larreta le lleva ventaja por la instalación del también legislador Diego Santilli en el principal distrito electoral del país.
Espert se encuentra cerca de Juntos por el Cambio (JxC), tiene buena relación con Bullrich, con Larreta y hasta con Macri. De hecho, mantuvo conversaciones con los tres en los últimos meses. Sin embargo, la mejor sintonía es con el alcalde. De cerrar un acuerdo con el economista, la exministra de Seguridad deberá decidir si sella la alianza como titular del PRO o para auspiciar su propia candidatura.
Larreta no duda de la respuesta y su entorno ya analiza la posibilidad de sembrar la semilla de la discordia. En Uspallata creen que Bullrich quiere utilizar el partido para su propio beneficio. “Busca usar el sello del PRO para cerrar acuerdos que le den un poco más de aparato, pero el problema es que esas alianzas no benefician al partido, sino todo lo contrario”, analizan.
Los representantes de Larreta utilizarían los ejemplos de Neuquén y Mendoza, en donde Bullrich se expresó en contra de que el PRO compita por fuera de JxC, para pedir que la presidenta del partido se tome una licencia en su cargo. Esa decisión todavía está en evaluación y, a sabiendas del impacto puertas adentro que puede tener, el jefe de Gobierno se mantiene alejado para poder alegar “desconocimiento”.
Mientras tanto, el alcalde volverá a reunirse este martes con el expresidente en su casa del country Cumelén, en Villa La Angostura. El encuentro se producirá a una semana de la instantánea entre el fundador del PRO y la exministra, que difundieron en las redes sociales. ¿Habrá foto con Larreta para equilibrar la balanza? Todo parece indicar que sí, pero en el larretismo le quitan importancia.
La decisión de Larreta de mostrar su intransigencia ante los movimientos de Macri se fundamenta en la creación del team paloma dentro de JxC. Convencido de que el expresidente no competirá en las elecciones, el jefe de Gobierno dedicó buena parte de su tiempo a terminar de delinear algunas de las estrategias electorales que aplicará.
De acuerdo a lo que pudo saber este portal, Larreta mantendrá la hiperactividad que lo caracterizó desde el inicio del año. Una parada clave será también La Pampa. Por ahora, no tiene pensado regresar antes del 12 de febrero para apoyar a su candidato Martín Maquieyra, resta ver si lo hará en el caso de una victoria del diputado en la interna.
Esta semana, todas las figuras del partido comenzarán la peregrinación a la provincia para apoyar la candidatura de Maquieyra. De no haber cambios, el alcalde partiría rumbo a Europa en marzo para mostrarse como candidato presidencial ante la Unión Europea (UE) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).