CÓRDOBA (Corresponsalía) Mostrar fortaleza y unidad antes que el socio mayoritario en la provincia, la UCR, muestre fortaleza y unidad. Tal es la conclusión que las voces del PRO local destacan sobre la excursión de María Eugenia Vidal. Durante tres días la diputada nacional realizó un intenso raid de actividades por las principales ciudades: Río Cuarto, Villa María, Carlos Paz y la capital. Allí visitó empresas, fábricas, una planta de biodiesel, se reunió con referentes y, junto a sus equipos técnicos, analizó la situación nacional en las distintas fundaciones que tributan al proyecto cambiemista. En ese tren, además de buscar empoderar a la tropa amarilla mediterránea, con su gira por el bastión electoral anti-K la exgobernadora bonaerense también sumó millas a una carrera presidencial que venía sosteniendo de manera solitaria con viajes por el país y que en la última semana cobró vigor de la mano de Mauricio Macri.
En cada una de sus paradas, se mostró con distintas figuras del PRO mediterráneo, por encima de cualquier tensión interna. Un mensaje de unidad, con recuento de glóbulos amarillos, en la previa de la mesa nacional de Juntos por el Cambio (JxC) que se realiza este viernes en Río Cuarto. Anterior también a la reunión que la UCR concretó este jueves en la Casa Radical de la misma ciudad.
La imagen conciliadora no se aleja de su reconocido mohín angelical, pero cobra otra dimensión tras el espaldarazo brindado por el expresidente, quien, además de incrementar los registros fotográficos mutuos, la ha subido al carro de quienes compiten por la precandidatura presidencial del espacio, junto a Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, ya en plena carrera para intentar llegar a la Casa Rosada.
La gira cordobesa de Vidal comenzó en la tarde del miércoles. En el centro de la capital participó de un encuentro con un colectivo de mujeres PRO, con preminencia de empresarias y periodistas. Allí llegó convocada por Soher el Sukaria, una de las anotadas para la carrera por la intendencia de la ciudad.
Compañeras de banca en la Cámara de Diputados, manifiestan un vínculo que trasciende lo partidario. Aunque no oculten predilección mutua, ambas han sido muy cuidadosas para no atizar la propia interna mediterránea.
Versiones que adelantaban una presunta proclamación para la exconcejala, o para algún otro nombre propio, quedaron rápidamente desestimadas. En movimientos posteriores, Vidal se dejó ver con dirigentes que construyen desde distintos andenes: la también diputada Laura Rodríguez Machado, referente de Bullrich; el legislador Darío Capitani, macrista de pura cepa y referente de Villa María; el vicepresidente y apoderado del PRO Córdoba, Oscar Agost Carreño, armador de Rodríguez Larreta. Para el sábado, prevé una visita por Villa Carlos Paz junto a Gustavo Santos, designado director para las Américas de la Organización Mundial del Turismo y hombre identificado con Mauricio Macri.
"No hacemos la chiquilinada de ir o no ir de acuerdo a quién nos represente. Si viene un referente, vamos todos", señala una de las legisladoras nacionales.
“Mariú no trajo la interna nacional. Vino a empoderar al PRO. Pidió estar con todos, incluso con los socios. Dejó en claro, nuevamente, que queremos ganar en Córdoba”, destaca uno de los armadores amarillos.
“La quieren tanto Mauricio como Horacio. Ella lo sabe y calcula. Como también sabe que no hay avances en la construcción local. Por eso su discurso de unidad más allá de los propios”, interpretó un jugador del equipo del expresidente.
Cuidadoso fue su trato también con los socios en el aún no concluido armado de la versión cordobesa de Juntos por el Cambio. A la salida del encuentro con mujeres, Vidal cenó con referentes radicales y del Frente Cívico. En la fría tarde del jueves compartió un café con Rodrigo de Loredo, el nombre que más expectativas genera en la UCR cordobesa.
A nadie escapa, no obstante, que la revista a la tropa PRO ocurrió pocas horas antes del encuentro que el radicalismo escenificó en Río Cuarto, en la previa de la Mesa Nacional. Una demostración de fuerzas, aún sin contienda, en un escenario donde el favoritismo viste otras casacas. “Habló de unidad, pero la base es el PRO. Vino a empoderarnos. Es un mensaje a Luis Juez, a De Loredo y otros, de que no nos van a llevar puestos, tengamos o no candidatos. Nosotros no llegamos sin ellos, pero ellos tampoco llegan sin nosotros. La nuestra es la marca que más vale en JxC”, dice a Letra P un dirigente amarillo capitalino.
En agosto
Tras las anunciadas deserciones de Macri y Rodríguez Larreta, Vidal será la principal figura del PRO, junto a la jefa partidaria, Patricia Bullrich, en el cónclave de la coalición que se desarrolla este viernes en Río Cuarto. Un flamante liderazgo, con proyección dentro y fuera del propio redil.
“Córdoba es la tierra prometida de Cambiemos. Sabe que necesita fortalecerse aquí para alentar cualquier proyección. También sabe que llega bien a todos los sectores. No genera rechazos. Profundiza un mensaje de tolerancia. No provocar, no lastimar, eso será clave si decide lanzarse por más en 2023. Mucho más si hay que saltar la grieta", analiza una voz sentada en aquella mesa.
La exgobernadora evaluará los dividendos de esta nueva excursión, la segunda del año, tras su vuelta a Buenos Aires. Concretará una tercera visita, en los primeros días de agosto. Para entonces, vaticinan voces inquietas, el partido fundado por Macri habrá recuperado plenamente su actitud triunfalista.