Con el voto de Argentina, la Asamblea General de la ONU suspendió este jueves a Rusia del Consejo de Derechos Humanos por la invasión militar a Ucrania. Tal como lo adelantó Letra P, el presidente Alberto Fernández había ordenado que la delegación nacional ante el organismo acompañe la iniciativa de Estados Unidos.
La postura argentina había sido adelantada por la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, en su habitual rueda de prensa de los jueves en la Casa de Gobierno. "El Gobierno argentino tiene una tradición de repudio a las violaciones de derechos humanos" y que, con esta votación, "lo único que hace es seguir siendo consecuente con esa decisión", dijo en diálogo con los periodistas.
De esta manera, Cerruti ratificó que la Argentina "tiene una tradición de votar en repudio a las violaciones de los derechos humanos en todos los países en cualquier época, no importa el signo político", y añadió que también por esta política hoy ocupa la presidencia del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
El cuerpo aprobó esta medida con 93 votos a favor, 24 en contra y 58 abstenciones. Además de Estados Unidos y la propia Ucrania, respaldaron la medida los países de la Unión Europea, naciones latinoamericanas como Argentina, Chile, Colombia, Perú o Uruguay y otros Estados como Australia, Canadá, Turquía o Noruega.
En contra votaron 24 países, entre ellos la propia Rusia, China, Cuba, Irán, Nicaragua o Siria.
Mientras, 58 Estados optaron por la abstención, incluidos Brasil, Egipto, El Salvador, India, México, Nigeria, Pakistán o Arabia Saudí.
Creado en 2006 para sustituir a la fracasada Comisión de Derechos Humanos, el Consejo es el máximo órgano de Naciones Unidas en este ámbito y está compuesto por 47 países, elegidos para mandatos de tres años.
Su composición, que se decide en elecciones celebradas anualmente, ha sido criticada regularmente por incluir a Estados con historiales muy dudosos en materia de derechos humanos.