"Hay actores de la vida política que buscan el quiebre de Juntos por el Cambio, entre ellos Javier Milei, que no forma parte de JxC e intenta quebrar nuestra unidad siendo funcional al oficialismo". La dura acusación fue lanzada en forma de comunicado por la mesa nacional de la coalición opositora después del cónclave del mediodía de este miércoles. Como prólogo de un cara a cara tenso de la cúpula, no sólo figuraba en agenda el ingreso o el veto del diputado liberal al espacio; también, una versión que se coló a la tapa del diario Clarín sobre un supuesto acuerdo entre el gobernador jujeño, Gerardo Morales, y el titular de Diputados, Sergio Massa, para las designaciones del Consejo de la Magistratura.
"Somos el cambio sin anarquía. Fuimos y somos, hace más de una década, el límite al kirchnerismo que necesita la Argentina y la alternativa de cambio profundo", agregó el mensaje firmado por la cúpula opositora. Reaparecido en la marquesina pública, con renovados rumores de un segundo tiempo, estuvo Mauricio Macri después de compartir con Horacio Rodríguez Larreta una reunión con el gabinete porteño por la mañana. También estuvieron el titular de la UCR y la del PRO, Patricia Bullrich. Entre ambos había tomado temperatura en los últimos días la idea de Milei como límite, para el jujeño; o una abierta invitación a entrar a JxC, lanzada por la exministra de Seguridad.
Con un texto que mostró la prosa de las palomas, con esta negativa a La Libertad Avanza, queda en stand by el debate sobre cuánto se abrirá la puerta para la tropa del economista. Es una pulseada interna que, con este único texto, no parece haberse cerrado: a modo defensivo, termina postergando una discusión que hoy por hoy amenazaba con escalar al borde de una ruptura, una situación disimulada por la novela del oficialismo que se lleva casi todas las miradas. El factor Milei dejó en evidencia que el sector liberal venía comiendo parte del espectro del electorado macrista. Fue una alarma no sólo para los halcones del espacio, ya que también llegó al punto de obligar a un "moderado" como Larreta a correr detrás de su agenda, como con el reciente proyecto para quitarles los planes sociales a quienes lleven a sus hijos a las protestas.
Después de agendar una serie de futuros encuentros temáticos (de energía al cambio climático) y apuntar contra Milei, la mesa nacional salió en defensa de Morales. "Hemos sufrido una operación de envergadura intentando involucrar al gobernador de Jujuy y Presidente de la UCR, Gerardo Morales, en una negociación con el Gobierno por los cargos del Consejo de la Magistratura", comienza el comunicado el respaldo. "Negamos esta falsa información de manera rotunda e insistimos en que el cargo de la minoría en el Senado corresponde a Juntos por el Cambio, el Senador Luis Juez. Además consideramos que este nivel de mentira atenta contra los valores democráticos de defensa de la verdad". La sospecha hablaba de un toma y daca para designar, de forma salomónica, a la diputada radical Roxana Reyes y al senador camporista Martín Doñate después de la jugada de Cristina Fernández de Kirchner para simular una tercera minoría en la Cámara alta.
"Decidimos oponernos a la nueva maniobra del oficialismo en el Senado, que en esto se muestran juntos, de ampliar los miembros de la Corte para intentar tomar control de la misma", cierra el mensaje de JxC.
Estuvieron, también, Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica), Miguel Ángel Pichetto (Encuentro Republicano Federal), los senadores nacionales Alfredo Cornejo, Humberto Schiavoni y Martín Lousteau; los diputados nacionales Mario Negri; Juan Manuel López, Cristian Ritondo y Federico Angelini; las diputadas nacionales María Eugenia Vidal y Laura Rodríguez Machado, la diputada provincial Maricel Etchecoin, Ernesto Sanz y Ramón Puerta.