Este sábado, en medio de un rebrote explosivo de la pandemia de coronavirus, comenzó a regir en todo el país la obligación de presentar el pase sanitario para todas las personas mayores de 13 años que quieran asistir a actividades consideradas de riesgo. Según estableció la resolución firmada por el jefe de Gabinete, Juan Manzur, y la ministra de Salud, Carla Vizzotti, el pase será exigido en locales bailables, discotecas o similares que se realicen en espacios cerrados; salones de fiestas para bailes, bailes o similares que se realicen en espacios cerrados; viajes grupales de egresadas y egresados, de estudiantes, jubiladas y jubilados o similares; eventos masivos organizados de más de mil personas que se realicen en espacios abiertos y cerrados o al aire libre.
Para poder asistir a estos eventos, las personas deberán acreditar que completaron su esquema de vacunación con dos dosis, al menos 14 días antes. La forma más sencilla de acreditar la vacunación completa es a través de la aplicación para teléfonos celulares Cuidar. Dependiendo de cada provincia, también se puede solicitar la acreditación física en papel. En la provincia de Buenos Aires, por ejemplo, se entrega una tarjeta plástica.
La aplicación Cuidar también estrena una nueva función, el autodiagnóstico para Covid-19. Allí, antes de entregar el certificado, se deberá responder si se presentan síntomas. En caso de ser positivo o si la persona aparece como caso activo de coronavirus en el Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud, la pantalla se bloqueará y no entregará el certificado hasta tanto no se modifique su situación.
Cada provincia está a cargo de su implementación y cinco decidieron implementarlo desde el pasado 21 de diciembre. Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Río Negro y Santiago del Estero fueron las que se anticiparon. En el Ministerio de Salud de la Nación señalaron que el objetivo del pase "se inscribe en el marco de las estrategias para ampliar coberturas de vacunación que la cartera nacional y las provincias vienen impulsando".
Según un estudio publicado en la revista científica The Lancet, en Europa, el llamado "green pass" impulsó "un aumento de las vacunaciones 20 días antes de la implementación" y a la vez generó un "efecto duradero hasta 40 días después". El estudio agrega que "los incrementos fueron especialmente notables en la población menor de 30 años". Eso es, precisamente, hacia donde apunta la medida en Argentina.
La estrategia ya comenzó a mostrar resultados en la provincia de Buenos Aires, un distrito clave ya que se trata del mayor del país y enfrenta el movimiento turístico que produce la temporada de verano en la costa atlántica. Allí, según el exministro de Salud provincial Daniel Gollán, en sólo cinco días la implementación del pase disparó en 40% la vacunación.
"Hace cinco días que aumentó entre un 30 y un 40%, la gente que se está vacunando", había anunciado el diputado, mientras que la subsecretaria de Atención y Cuidados Integrales en Salud del Ministerio de Salud bonaerense, Alexia Navarro, ratificó que la provincia registra un "aumento" en la cantidad de personas que concurren a los centros de vacunación para ser inmunizados, tras la primera semana de implementación del pase sanitario en el territorio bonaerense.
Ese aumento en el número de personas vacunadas resulta necesario para enfrentar la ola de contagios ya que según Navarro, en la provincia existen dos millones de personas que recibieron la primera dosis pero que no fueron a aplicarse la segunda, aún estando liberado el acceso en las postas de vacunación.
En su rueda de prensa del miércoles pasado, Vizzotti también anunció que consensuó la reducción de 10 a 5 los días el aislamiento para contactos estrechos de casos positivos asintomáticos, siempre que tengan el esquema completo de vacunación, mientras que aquellos que sean positivos con síntomas leves deberán resguardarse durante siete días.
Tras la última reunión de 2021 del Consejo Federal de Salud (Cofesa), la funcionaria especificó que, para contactos estrechos asintomáticos sin vacunarse o con el esquema incompleto, el aislamiento se reducirá a siete días con un test PCR negativo o, si no se cuenta con el examen, se mantendrán los actuales diez días, al igual que para las personas que resulten positivas y no se hayan vacunado.
Vizzotti confirmó, además, que se considerará casos positivos a las personas que sean contacto estrecho de un caso confirmado de Covid-19 y tengan síntomas, sin necesidad de examen de laboratorio, porque "pierde sentido el testeo al 100 por ciento de las personas cuando hay una altísima circulación", como en los últimos días.