La presidenta de PRO, Patricia Bullrich, se metió en la interna entre Juan Manzur y Osvaldo Jaldo, y cuestionó las negociaciones que lleva adelante el gobierno nacional para evitar que el vicegobernador de Tucumán asuma la gobernación en reemplazo de quien fue designado nuevo jefe de Gabinete.
“Presidente: ofrecer cargos a un vicegobernador electo para que el elegido jefe de gabinete Juan Manzur pueda seguir ‘controlando’ su provincia, es una práctica típica de un poder clientelar. La pagamos con el dinero público y viola la idoneidad constitucional para los cargos”, afirmó la exministra en su cuenta de Twitter.
Y agregó: “Presidente: absténgase de entrometerse en el orden legal sucesorio de la provincia con plata de los argentinos. Es una negociación incompatible con la ética que deberían tener un presidente y un gobernador”.
Tal como lo contó Letra P, Jaldo se negó a aceptar un sillón en el Banco Nación a cambio de correrse de la línea de sucesión y en sus redes socialeas felicitó al gobernador por asumir como Jefe de Gabinete "en estos momentos difíciles" y se puso a disposición "en lo que haga falta", pero avisó que siendo vice y asumiría la gobernación.
Ante esta situación, Manzur convocó a su casa a integrantes de su tropa que ocupan sillas en el gabinete, las intendencias, la Legislatura y aspirantes de la boleta para el 14 de noviembre y, varias horas de discusión, el manzurismo propuso un pacto: el gobernador no renunciará, sino que se tomará licencia y lo mismo le propuso a Jaldo.
Para la sucesión propuso que el Ejecutivo quede a cargo del diputado Sergio Mansilla (que responde a Manzur), mientras que Jaldo pondría a uno suyo frente al Legislativo.