Legisladoras y legisladores de la oposición al Movimiento Popular Neuquino (MPN) volvieron a unirse para anticipar que no acompañarán el proyecto del gobernador Omar Gutiérrez que busca obtener deuda para hacerle frente al aumento prometido para los trabajadores del sector público. Lo anunciaron en conjunto parlamentarios del Frente de Todos, de Juntos por el Cambio, y de la Democracia Cristiana. Para el oficialismo neuquino, sólo es una acción especulativa a un mes del cierre de listas. Lo cierto es que el acuerdo opositor suma la suficiente cantidad de voluntades para frenar la aprobación de la iniciativa.
“Todo el arco opositor dice que el endeudamiento no es necesario”, ratificó la legisladora del PRO, Leticia Esteves, ante la consulta de Letra P. En este sentido, explicó el sentimiento reinante en la mayoría de los bloques del parlamento, un reducto en el que se palpita la campaña electoral en la que Neuquén renovará tres bancas en Diputados, en comicios en los que el MPN pone a prueba su presencia en el Congreso.
Con dureza, en el texto difundido a la prensa de manera conjunta, advirtieron que la modificación del proyecto oficial es solo “un disfraz del anterior”, que “implica el mismo endeudamiento, pero en dos partes”. En ese marco, juraron no estar “dispuestos a ser cómplices de una decisión cuyo único destino es dejar sin herramientas a quienes tengan que gobernar en el futuro”.
Como explicó Letra P, el MPN intentó aprobar sobre tablas el endeudamiento en la última sesión y no lo logró a pesar de obtener 18 votos, seis menos de los dos tercios de la Cámara que necesitaba para avanzar con la aprobación. En las últimas horas, para seducir a los díscolos, el oficialismo introdujo modificaciones. Según remarcan en la oposición, la jugada implica aprobar un endeudamiento por más de 7.000 millones de pesos con una revisión en el tercer trimestre a través de una comisión de seguimiento, que evalúe si toma el resto de los 12.800 millones, de acuerdo a la recaudación, regalías petroleras y la coparticipación.
“No hace falta un nuevo bono, Neuquén está absolutamente endeudada”, le dijo a este medio otro de los firmantes del comunicado, el legislador de la Democracia Cristiana, Carlos Coggiola, cuando adelantó que el exgobernador Jorge Sobisch se presentará como candidato a diputado nacional con o sin acuerdo electoral con Juntos por el Cambio.
“Creemos que el incremento es justo y siempre apoyamos el reclamo de los trabajadores; pero sostenemos que llegamos aquí por una manifiesta impericia del gobierno del MPN y de Gutiérrez que muestra como única opción para salir de los conflictos la toma de deuda. Está claro que la política económica es potestad del Ejecutivo provincial, pero nuestro plexo normativo señala la necesidad de la aprobación legislativa a los endeudamientos”, insistieron los legisladores y legisladoras.
Al respecto, y en un notable aumento de la participación como vicepresidente del MPN, fue el secretario general del Sindicato de Petróleo y Gas Privado, Guillermo Pereyra, quien apuntó contra el kirchnerismo y el macrismo neuquinos. “Es insólito verlos tan unidos (al PJ y al PRO) oponiéndose a un proyecto que busca reparar un justo reclamo, lo que ellos decían que había que hacer. Están siempre del lado opuesto a las soluciones”, se quejó el poderoso dirigente gremial.
La hoja de ruta de la discusión por la deuda continúa en el palacio neuquino. En comisión, el oficialismo buscará que se apruebe el tratamiento para llevarlo al recinto una vez más. La Legislatura neuquina tiene 35 escaños y las 13 firmas opositoras estampadas en el documento de rechazo al proyecto del Ejecutivo dejan al oficialismo sin chance de lograr los 24 votos necesarios para alcanzar los dos tercios que requiere la aprobación del endeudamiento.