La muerte en 2019 de Horacio “Pechi” Quiroga, intendente de Neuquén por cuatro períodos y máximo referente de la oposición al Movimiento Popular Neuquino (MPN) en el último tiempo, dejó acéfalo de líderes a Juntos por el Cambio. En medio de una transición para ordenar su estructura, y obligada a fortalecerse en el año que se renuevan tres bancas en la Cámara baja y la mitad del Concejo Deliberante de la capital provincial, la coalición explora una senda que la reposicione con una organización horizontal, en la que cuatro partidos presentan candidatos. Antes del cierre de listas se presenta una encrucijada: negociar con la Democracia Cristiana de Jorge Sobisch, tanteado por Horacio Rodríguez Larreta para su campaña nacional, un plan que no seduce a todos los integrantes del frente.
El PRO, la Unión Cívica Radical (UCR), el ARI y Nuevo Compromiso Neuquino (NCN) diseñan un esquema de unidad. Por ahora, tres de los cuatro promueven sus postulantes que se definirían, hasta hoy, en las primarias. Lo que no se sabe es cómo se organizará la alianza cuando se elijan nueve concejales en Neuquén capital, el distrito electoral más importante.
El primero que manifestó intenciones de renovar es el actual diputado nacional David Schlereth, que llega con la venia del PRO. El radicalismo quiere como cabeza de lista a Pablo Cervi. Por NCN suena Esteban Bosch, último candidato a intendente de Cambiemos en San Martín de los Andes. Si la Democracia Cristiana se integra, nombran hasta el mismo Sobisch, pero no habría quórum para esta instancia.
“Los cuatro partidos coincidimos en mantener unida la coalición para llegar a los acuerdos necesarios. Las PASO nos organizan, cada uno tendrá su candidato a diputado. En la ciudad, deberemos alcanzar una lista de consenso”, cuenta a Letra P la diputada provincial Leticia Estéves, una de las figuras más jóvenes del PRO. Desde el parlamento, Estévez se erigió como parte de la renovación que respalda a Schlereth. “Es la primera elección sin Pechi Quiroga. Antes, era nuestro ordenador. No hay un liderazgo vertical, por eso cada partido tiene sus propios nombres”, reconoce la legisladora.
El nuevo esquema asambleísta de JxC posibilita que más de un candidato o candidata quiera hacerse lugar. Mientras avanza el cierre, con “la coalición unida, fuerte” para competir con el MPN y el Frente de Todos (FdT), el radicalismo insiste con que Cervi, poderoso empresario frutícola de la región, encabece la nómina.
Su antecedente en una elección fue en 2019, en la que Quiroga fue electo senador nacional. Con la muerte de Pechi, Cervi -que integró la lista- peleó con la senadora Lucila Crexell el lugar en el Senado, pero la Justicia le dio el espacio a la ex MPN, sentando precedente en el debate por el cupo femenino. Crexell, que había llegado al Senado en 2013 junto al dirigente petrolero Guillermo Pereyra, se sumó al proyecto presidencial de Mauricio Macri gracias a un acuerdo de Miguel Ángel Pichetto y Humberto Schiavoni.
En contacto con Letra P, Cervi asegura que su candidatura primero debe pasar por el Comité provincial de la UCR. “Cambió el escenario, el espacio se arma desde un plano horizontal. Buscamos una forma de aportar”, responde. Y agrega: “Se necesitan equipos, por eso la coalición de cuatro partidos debe ponerse de acuerdo. Hoy, los canales de diálogo están abiertos”.
Aliado
En los calurosos días del verano, Eduardo Macchiavelli encabezó una comitiva que Rodríguez Larreta envió a la Patagonia. Estuvo en Cipolletti y Neuquén, donde protagonizó diversas reuniones de las que trascendió un asado en la casa de Sobisch. Allí, la voz del jefe de gobierno porteño le pidió al exgobernador y candidato en 2019 por la Democracia Cristiana unirse al proyecto nacional de su conductor político.
Desde entonces, el caudillo que se animó a una candidatura presidencial en 2007 y fuera tres veces gobernador bajo el paraguas protector del MPN, amagó un acuerdo que nunca se oficializó. La ascendencia de Sobisch sobre el electorado de la capital, sobre todo, genera expectativas en la coalición opositora. Fuentes que trabajan por un acuerdo le aseguraron a Letra P que, si no se puede en esta instancia, trabajarán para el 2023. "Es una gran oportunidad llegar fuertes, el gobernador no tiene reelección y al MPN le cuesta cada vez más conformar un candidato", explicaron.
Como si fuera poco, además de tres lugares en la Cámara baja, este año Neuquén elige concejales. Ese será otro desafío para JxC, donde se espera que la negociación sea mucho más dura y de difícil resolución. En esta instancia, el PRO deja una banca y la UCR, tres.