La diputada nacional Paula Oliveto es la tercera candidata en la lista de aspirantes de Juntos por el Cambio (JxC) por la ciudad de Buenos Aires que encabeza la exgobernadora bonaerense María Eugenia Vidal. Busca un nuevo mandato como integrante del bloque de la Coalición Cívica (CC) y, en diálogo con Letra P, advierte que la alianza opositora que integra todavía no decidió si reclamarán la presidencia de la Cámara baja en caso de que el interbloque opositor se transforme en primera minoría después del 10 de diciembre.
- ¿Por qué decidieron lanzar una campaña propositiva en la última etapa rumbo al 14N?
- Queríamos que las propuestas fueran participativas para que el pueblo que tenemos que representar las trabajara. Abrimos una etapa de escucha para que la gente participe en mesas, encuentros, internet y redes sociales. Tomamos esas propuestas y las tratamos de bajar a las posibilidades que tiene una fuerza que va a competir en unas elecciones parlamentarias nacionales. Estamos en una situación de crisis y necesitamos que las voces en el Congreso sean contundentes y tengan claro lo que representan.
- ¿Por qué la agenda porteña ocupa tan poco espacio en el discurso de la lista de JxC?
- Vamos a ser representantes del pueblo, a diferencia de los senadores que representan a las provincias. Somos parte de un proyecto político que gobierna la Ciudad de Buenos Aires con Horacio Rodríguez Larreta, pero también tenemos que defender a los porteños que representamos en cuanto a recuperar la coparticipación y que se respeten sus intereses. También la autonomía porteña. Por eso también vamos a trabajar en las transferencias que se tienen que dar, tarde o temprano. La ciudad tiene que tener su autonomía, pero con recursos.
¿Qué balance hace del lugar de la Coalición Cívica dentro de la alianza?
- La CC es socia fundadora de Juntos por el Cambio, es una fuerza que ya tiene 20 años. Es muy importante que una fuerza se mantenga luego de tantos años y siga teniendo representación parlamentaria. Nos sentimos muy cómodos y formamos parte de un equipo con nuestra impronta y nuestro compromiso público. Así como le prometimos hace 20 años a la sociedad que íbamos a defender el contrato moral, lo estamos haciendo como parte de la alianza que gobierna en la Ciudad.
- Vidal dijo que la decisión de reclamar la presidencia de Diputados se va a tomar después de que vote la gente. ¿Cuál es su opinión?
- Coincido con Vidal. Tiene que ser una decisión colectiva, pero vamos a hablar del diseño institucional argentino. Este diseño establece un sistema de pesos y contrapesos. Es una copia del sistema norteamericano. Cuando el republicano Donald Trump era presidente de los Estados Unidos, la titular de la cámara de Representantes era la demócrata Nancy Pelosi. Eso pasa cuando se es primera minoría.
- ¿Y cuál es la diferencia con lo que están debatiendo ustedes?
- Acá tenemos una primera minoría que construyó la gente y creo que es virtuoso el sistema, porque esos pesos y contrapesos se tienen que dar en el Congreso.
- Hay quienes lo consideran una forma de cogobierno. ¿Usted qué piensa?
- No se trata para impedirle nada al Gobierno, porque la gente también votó al Frente de Todos para el Ejecutivo. Es para limitar y poder controlar al poder. En definitiva, ése es el diseño constitucional argentino y nadie se tiene que poner mal porque la oposición logre la presidencia de la Cámara de Diputados si eventualmente se dan las circunstancias.
- ¿Y si esa instancia no prospera?
- Iremos a una negociación donde la representación popular se vea reflejada en la distribución de las comisiones y en el manejo de la agenda.
- El extitular de la Cámara baja Emilio Monzó dijo hace dos semanas que no estaba de acuerdo con esta posibilidad, porque él había sido elegido como presidente de Diputados con el acuerdo del peronismo. ¿Qué le contesta?
- Cuando a él lo eligieron, el Frente de Todos no era la primera minoría, sino que eran bloques más chiquitos. No es la misma circunstancia, pero lo discutiremos dentro del interbloque y se buscará una síntesis. Uno puede tener una opinión personal, como lo hizo Elisa Carrió. Ella fue la primera que lo expresó. Es una gran conocedora del reglamento de la Cámara, pero va a primar la decisión del conjunto.