Como sucede desde que el Alberto Fernández desembarcó en la Casa Rosada, Martín Guzmán pasó este fin de semana por la Quinta de Olivos. Esta vez, el eje de la charla con el Presidente no fue el cierre de las negociaciones de la deuda, ni las incipientes conversaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI). El foco del encuentro estuvo puesto en el Presupuesto 2021, que el primer mandatario y el economista terminaron de sellar a solas y que marcará el bautismo del plan albertista, con el sello "realista" del ministro de Economía.
Si bien los indicadores macroeconómicos ya estaban trazados, Guzmán y el Presidente trabajaron en particular el fin de semana en el contenido del mensaje, que será el corazón del plan económico que el Gobierno quiere mostrar tras un primer año de crisis, marcado a fuego por la pandemia y por la renegociación de la deuda.
Además de ver a Fernández, el ministro trabajó con su equipo en el Palacio de Hacienda el fin de semana para terminar de consolidar el texto. Este lunes, almorzó en la Cámara de Diputados con el presidente del cuerpo, Sergio Massa, el jefe del bloque del Frente de Todos, Máximo Kirchner, y el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro. El encuentro se extendió durante cuatro horas. Más tarde, se reunió con el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y volvió a Olivos para verse por última vez con el Presidente, antes del envío del proyecto a Diputados. La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner también siguió de cerca el detalle del texto.
El mensaje del Presupuesto marcará una identidad. En su primer año en la Casa Rosada, el Gobierno gestionó con la prórroga del Presupuesto 2019, con las reasignaciones de partidas que hizo el jefe de Gabinete durante la pandemia. Pero el Frente de Todos (FdT) no le pudo poner su impronta y tanto el Presidente como el ministro de Economía escucharon una y otra vez que el Gobierno no tenía plan. El proyecto que ingresará este martes a Diputados será la primera oportunidad para mostrarlo.
Fuentes con acceso a la letra del Presupuesto 2021 afirman que las proyecciones del texto serán "muy realistas" -en línea con la idea de "tranquilizar la economía", que Guzmán suele repetir en sus apariciones públicas-, y tendrá un fuerte componente de inversiones destinado a la infraestructura y a la obra pública.
Los recursos, explican en la Casa Rosada, son escasos, pero estarán dirigidos a apuntalar el empleo formal y, a su vez, a dinamizar la economía con un sentido descentralizado y federal, sobre la que insisten tanto Fernández como Guzmán. Allí aparecerá la letra de las 23 provincias y la Ciudad de Buenos Aires, que en conversaciones con Guzmán, Cafiero, De Pedro y el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, marcaron su agenda de prioridades en materia de obras. En esa línea, según pudo saber Letra P, los gastos de capital pasarán del 1,1% al 2,2% del PBI. Además, el Gobierno promete que el contenido del mensaje será "completamente diferente" a los tradicionales y que tendrá una fuerte impronta de perspectiva de género en su elaboración.
El proyecto, que ingresará este martes a la Cámara de Diputados, es el resultado de varios meses de preparación. Las reuniones de los y las integrantes del gabinete con el equipo económico de Guzmán comenzaron formalmente el 30 de junio, convocadas por Cafiero. Desde entonces, se sucedieron encuentros bilaterales y rondas de conversaciones con las y los 23 gobernadores y Horacio Rodríguez Larreta.
Según acordaron este lunes el ministro Guzmán, el Presidente y las autoridades de Diputados, el Presupuesto se enviará formalmente este martes, según marca la ley, pero la presentación ante la Comisión de Presupuesto de la Cámara baja se hará recién el martes 22.