El gobierno tenía hasta este jueves al mediodía para apelar el fallo, fechado el 19 de junio, que devolvió a la familia Vicentin al directorio de la empresa. Por lo que se tomó varios días para presentar la respuesta.
De este modo, el gobierno no renuncia a su jugada, la primera que se instaló en el escenario, la de intervenir nacionalmente a la empresa, para luego derivar al Congreso el proyecto de ley de expropiación.
La Casa Rosada, entonces, insiste en el intento de remover a los directivos de la firma y, por otro lado, acicatea el Plan Perotti, que contempla la pata de intervención provincial más la integración de cooperativas y otros actores regionales.