“Los que tenemos más de 30 años de experiencia pasamos un montón de pandemias económicas, pero esta va a ser la peor. El sector está menos diez. Nunca vi esto”. El presidente de la Cámara de Servicios Especializados Provinciales de Transporte de Pasajeros, Roberto Zagame, detalló a Letra P un cuadro asfixiante para los transportistas escolares bonaerenses, a sabiendas de que serán uno de los últimos eslabones de la cadena de servicios en ponerse en movimiento cuando se decida reactivar las clases presenciales.
Advierte además que el regreso a la actividad será parcial: “Se trabajará con un protocolo de distanciamiento en el que se pedirá ocupar la mitad de los asientos disponibles, algo que se va a quedar por mucho tiempo”. Bajo ese esquema, concluye: “No es rentable la actividad”.
Al enfatizar que el 90% de los transportistas escolares viven exclusivamente de ese ingreso, ahondó sobre la complejidad de un retorno a medias: “Si de 35 asientos podés ocupar la mitad, cómo hacés para sostener la rentabilidad de la actividad, cuando tenés que pagar mantenimiento, combustible, habilitación, cubiertas, impuestos, patente y tenés que comer. Es imposible”.
Manifestación frente a la Gobernación el año pasado con múltiples reclamos al gobierno de Vidal.
Zagame piensa en un plan B. Contó que avanzan en coordinación con el Ejecutivo en una resolución que permita a los transportistas escolares ser contratados por las empresas que vayan retornando a la actividad, para trasladar a sus trabajadores. Así, se evitaría saturar el transporte público con la consecuente disminución de riesgo de contagio de coronavirus.
El dirigente explicó que el servicio especializado se divide en tres: excursión, contratado y escolar. Por la ley de transporte público, el servicio escolar no puede ser contratado. “Agradecemos lo que está haciendo el gobierno de Axel Kicillof por pedido de la Cámara: autorizar al servicio de transporte escolar a trabajar contratado a modo de asistencia para descongestionar el transporte público”. Según Zagame, la Subsecretaría de Transporte le confirmó que la resolución está próxima a salir.
El titular de la Cámara de Servicios Especializados dijo que en la provincia de Buenos Aires existen cerca de 4.500 transportistas escolares, muchos de los cuales se encuentran en una situación económica crítica, sin acceso a beneficios por contar con más de un vehículo -en algunos casos- o por no calificar para el acceso a créditos a tasas blandas –en otros.
Todo, en un contexto donde este sector no recibe subsidios como sí lo tiene el transporte público de pasajeros, ya que no posee tarifa plana. “Mucha gente está poniendo en venta los colectivos y camionetas. Pero, ¿a quién le venden un micro escolar cuando todos saben del parate de la actividad?”, remarcó. Están parado en un callejón financiero.
Además del pedido de asistencia financiera realizado a la Nación, Zagame giró una nota a la ministra de Gobierno bonaerense, Teresa García. Allí, además de propuestas y peticiones, incluyeron el pedido de “ayuda alimentaria a las familias del sector (…) Muchas de ellas no encuentran cómo alimentar a sus familias”, describe la misiva. “Hay gente que me llama llorando porque no tiene para darle de comer a sus familias”, relató el dirigente.